No soy lesbiana!!! O si? (myhr)

No sabia por donde empezar... si por el beso que me había dado Jamie... o aquel encuentro tan mmm hot? Con Tea, todo me daba vueltas, el alcohol, la droga, los analgésicos... argh!!!... no eres una lesbiana!!!, no puedes ser una lesbiana!... tenia que haber alguna forma para comprobarlo... camine de un lado para otro en mi habitación. Que hacer maldita sea?... tome mi celular y marque a Myhr.

-puedes venir a mi casa por favor?- casi le rogué.
-te necesito urgente!- chille. El accedió, tenia que hablar esto con alguien, quizás solo me estaba volviendo loca o se me había safado un tornillo con tanta basura que ingería constantemente.
Me fui al living a esperarlo, estaba desesperada. En cualquier segundo explotaría de los nervios y la incertidumbre... el sabría más al respecto... porque bueno el era mmm gay?...

Se había tardado más de una hora ya me estaba impacientando y por si fuera poco ni siquiera me quedaban cigarrillos, tendría que ir a comprar lo antes posible o me terminaría fumando el te de la casa. Llegó a la casa pude escuchar su moto cuando la estacionaba, lo vi desde la ventana hasta que abrió la puerta.

Por donde empezar!!!??... miles de imágenes, recuerdos, miradas, pensamientos, música se pasaron por mi cabeza, tenia tantas cosas que decir, y tantas que no... me daba un poco de pudor hablar de este tema con sol... pudor no!... vergüenza extrema!..., aunque con el era diferente, podía contarle de todo y sabría que con regaños o sin ellos me entendería fácilmente. Se acerco a mi y me besó la mejilla en señal de saludo yo respondí de la misma manera. Miré su rostro

-hola bola de pelos... si, yo estoy bien... y tu como estas?- entorne los ojos. Y sonreí dentro de lo que mi confusión me lo permitió.
-estooo.... amigo... creo que me esta pasando algo- se podía ver mi cara de consternación a leguas.
-no se por donde empezar es algo de lo que no estoy cien por ciento segura- susurré, mirando mi yeso, ya me había puesto nerviosa.

Arg!!... todo las palabras que tenia previamente ordenadas en mi cabeza se habían desvanecido cuando empezó a preguntar, me costaba hablar de esto... no era muy normal en mi pensar en la posibilidad de ser lesbiana... quizás solo había sido un desliz en mi vida, nada serio, a lo mejor podía olvidarme de esos ojos... y de esos otros ojos... maldición!... no solo me estaba volviendo lesbiana si no que también me gustaban dos mujeres. Nada podía ser peor en este momento... porque no me paso antes?.

-si... se me acabaron los cigarrillos... y el ron- reí nerviosa. Comencé a jugar con mi cabello, no sabia ni que pito decir.
-quería que me acompañaras a comprar... mi moto se descompuso- mentí, me encogí de hombros, el se iba a dar cuenta de aquello, yo no era de ese tipo de persona que llamaba a otra por una tontería de ese tipo.

No sabia cuanto tiempo más podría mentirle a Myhr, me costaba demasiado y el obviamente se daba cuenta de aquello pero no decía absolutamente nada, y era exactamente eso lo que me hacia estar callada más tiempo.

-si claro... para eso...- respondí con una sonrisa estúpida en el rostro, tome un poco de aire con lo que dijo de la cena, no sabia si tenia el dinero suficiente como para llenar esa cueva que tenia el de estomago – si hubiera podido ir al torneo, se me haría más fácil lo de tu cena, pero veré que ago, tendré que estrujar hasta a Wuashiminga para ver si le saco algo de dinero- reí, me encogí de hombros y salimos de la casa.

Me puso el casco, yo aun estaba con la mirada ida en el tiempo, empezó a andar, no me hacia muy bien pensar, y confundirme, yo por lo general siempre estaba segura de mi misma.... era un maldito ser no pensante... algo así como una mesa o una planta, después de una hora de paseo por la ciudad se detuvo en una licorería. Eso era justo lo que necesitaba... alcohol, mi preciado alcohol...

Nos bajamos de la moto y entramos al lugar. Ni siquiera tenia ese animo tan común en mi cuando entraba a sitios como ese, parecía un zombi. El calefactor con patas estaba más animado que nunca entre tantas botellas sus ojos brillaban, yo reí.

- quiero 2 de este- señale uno sin mirar – y 2 de este- miré a Myhr. – elige tu mientras- dije desganada, me acerque al sector de cigarrillos arrastrando las piernas, miré a la vendedora– me da 10 cajetillas de Lucky Strike- saque el dinero de mi billetera para pagar los cigarros. Miré a mi amigo –estas listo con eso?- pregunté alzando una ceja, esperando que ya se decidiera.

Ni siquiera me sorprendí por la colección de vodka que había traído Myhr consigo, era muy propio de el, lo conocí bebiendo y así seguiría por el resto de la eternidad... o bueno eso creía... Eligio una lista interminable de picadillos salado, a mi me dieron antojos tremendos de comer chocolate... estaba confundida pero el hambre continuaba allí.

-llevemos chocolates también- comenté con alegría fingida - 3 de estos, 4 de estos, y 10 de estos- señale todos los chocolates con la mano buena, Myhr solo negó con la cabeza sonriendo y pago toda la cuenta sin reprochar... y este de donde saca tanto dinero?.... el muchacho que atendía nos miraba con los ojos como plato, y bueno era obvio, nadie podía comer tantas cosas juntas, solo nosotros dos. Éramos unas malditas maquinas come todo.

-vayámonos de aquí, necesito emborracharme- cerré los ojos con fuerza, aun no sabia en que minuto le soltaría todo a mi amigo. El agarro las bolsas con una mano y echo todo dentro de una mochila inmensa que traía consigo siempre, me la puso en los hombros, pesaba mucho... pero en moto esa era la única opción para acarrear las cosas. Dejo lo que no cabía dentro de un pequeño compartimiento que tenia la motocicleta.

Tuve que apoyar todo mi cuerpo contra el para no caerme de espaldas de la moto, las cosas que traía eran muy pesadas. Llegamos a la casa en un escaso tiempo, me ayudo a bajar y de inmediato quito la mochila de mi espalda, moví los hombros para que volvieran a reaccionar, se me habían quedado dormidos. El cargo con todas las cosas que traíamos de la licorería, parecía que íbamos a hacer una fiesta como para 10 personas, pero éramos solo dos... adictos al alcohol y a la comida... entramos a la casa.

En ese momento me alegraba que toda mi familia se encontrara en Alemania en el torneo en el cual YO no podría participar, pero mi padre si. No sabría como mirar a la cara a Sol después de todo lo que me estaba pasando, y ella me rogaría o me golpearía hasta que me sacara la verdad... no estaba preparada para eso!...
Me tiré al sillón cerrando los ojos, inhale profundamente, estire mi manita buena hacia mi amigo

-ábreme una botella por favor Myhr- le dije Myhr?... oh my god!... hasta en mis modales estaban cambiando... eso no podía estar pasando!!...abrí los ojos y me levante del lugar no dejándole tiempo de reaccionar.

-mejor lo ago yo calefactor con patas- sonreí a medias, fui hasta la bolsa que aun estaba en sus manos, saque una de las botellas de ron, la abrí girando la tapa con mis dientes, con una mano mala era muy difícil abrir una botella, tiré la tapa al sofá y me empine la botella bebiendo un gran sorbo.
-lo necesitaba- susurré bajando la botella. Me volví a tirar al sillón

Levante la botella en señal del salud, el fue hasta el equipo de música, como pedro por su casa, me causaba gracia con la facilidad que se sentía a gusto en mi hogar, la música empezó a sonar, sonreí ante la melodía hacia años que no escuchaba esa canción y fue ahí donde mi sonrisa se borro del rostro cuando el me pregunto nuevamente que escondía.

Arghhhh!!!.... que demonios hacer ahora!!!???.... me sentía tan incomoda, no era sencillo hablar de esto, las veía a ellas hasta en la sopa, me estaba dando una crisis de estrés, necesitaba más alcohol. Bebí un largo sorbo. Me levante de mi lugar.

-quieres un poco de Maria Juana?- pregunté callando su pregunta
-no, no me respondas ya sé tu respuesta- corrí hacia el invernadero en busca de algunas hojas que había secado en la tarde, volví al cabo de unos minutos, con las mano llena de marihuana como si fuera un puñado de pastillas. La deje en la mesa de centro.

-creo que con eso tendremos- sonreí – saca el papel de arroz para preparar unos churros, tal vez podríamos hacerlo más interactivo, y divertido, haciendo una pipa o algo así, o quizás podamos repetir lo de campamento ¿te acuerdas?, o ... no sé cualquier cosa- las palabras salían atropelladas de mi boca, nunca hablaba tanto y así de nerviosa, mi respiración era agitada, tenia que hacer cosas para no pensar.

Compórtate como se debe mimi!... pareces una idiota!... me arrodille frente a la mesita de centro para intentar hacer algunos cigarrillos, no me resultaban... la marihuana salía por los lados, nadie pensaría que llevaba años de entrenamiento en esto actuando de esa manera... tome un trozo de papel entre mis manos, le puse de mi hierba y al intentar cerrarlo se desplomaba, me sentía muy torpe.

Mi amigo se dio cuenta de mi incapacidad, se sentó a mi lado y me dio un beso en la mejilla intentando componerme. Miré como hacia el los cigarrillos... ahora si que soy una inútil, ni hacer churros puedo!...trabajo rápidamente, algunos le salían bien y otros no tanto, yo soltaba una pequeña risilla cuando no le resultaban.

De un instante a otro tenia un churro en mi boca y el fuego enfrente mío, aspire un poco para prender mi marihuana. El silencio inundo el lugar cuando la rola termino, yo le daba una tras otra bocanada a mi cigarrillo... ni drogada te olvidaras de todo esto!... una canción nueva comenzó a sonar... me enfurecí, justo ahora una canción tan mamona!.

-no es mi día calefactor con patas.... definitivamente no lo es- tome mis rodillas con las manos aovillándome en el piso con mi espalda recostada al los pies del sillón. Deje que la letra de la maldita canción me invadiera... no me gustaba sentirme tan vulnerable... las vi a ambas, tan diferentes, pero tan semejantes...

-no puedo serlo- susurré con la voz ahogada, miré a Myhr, porque el no me producía lo mismo que ellas... el era hombre... porque no me gustaba?, era lindo y todo pero no era igual, no estaba el cosquilleo

Sentí su cálido abrazo, me hizo reaccionar, no me podía poner como loca por esto... yo no era lesbiana... no podía serlo... no debía serlo... era algo antinormal!, aun más de lo que yo ya era. Tomé una gran bocanada de aire... como iba a decir esto?... arghh!!!!... que estresante, odiaba sentirme tan estresada, esa no era mi naturaleza.

-en realidad... no lo sé calefactor con patas- lo abracé también, escondiendo mi rostro en su torso, todo era tan confuso!.
-parece...- susurré avergonzada –parece que me.... que me gustan las mujeres- hundí mi rostro más en su pecho, al cabo de unos segundos me separé, miré a los ojos a Myhr.
-pero...pero... no puede ser... no tiene que ser así bola de pelos- mi voz se escuchaba ahogada, desesperada... salgan de mi cabeza sucias mujeres!!!... argh!!... porque no se iban?... no, no, no y más no... quería borrarlas. Todo hubiera sido más sencillo sin conocerlas, de ahora en adelante no saldría más a drogarme afuera, o me podría enamorar hasta de un perro! Y eso si que seria extraño!, ahí si que se me safaria un tornillo.

Suspiré, era fácil decirlo... pero no hacerlo... me acomodé para poder mirarlo de frente.
-Calefactor con patas no es sencillo... a mi nunca antes me habían llamado la atención las mujeres, es extraño que me pase esto ahora- mi voz era seca, me puse a pensar unos momentos, quizás eran las drogas las que me tenían así... no, no podía ser eso o me hubiera pasado antes... o tal vez los medicamentos mezclados con alcohol... tampoco podía ser eso, mi atracción hacia Lucrecia había empezado antes de mi accidente.

Miré a mi amigo tratando de buscar alguna forma en la que el me pudiera ayudar o simplemente algo para saber si era o no “lesbiana”... argh!, que palabra más espantosa!... tenia que haber una solución para poder olvidar a esas tipas... haría hasta lo imposible para dejar de pensar en ellas de “esa forma”. Cerré los ojos.

-bésame Myhr... bésame por favor... necesito saber si esto es solo una jugarreta de mi cerebro- suplique.

De un segundo a otro, ya tenia al calefactor con patas besándome sin siquiera decir “chis”, sus demasiado calurosos labios sobre los míos moviéndose con ternura, respondí de la misma manera, pero no sentía nada... porque no sentía nada?... entrelace sus cabellos con mis dedos acercándolo más a mi... esto no podía ser cierto!!!!... vamooooos siente algo por la mierda!... mi desesperación era superior... tenia que olvidarlas, no lo estaba besando a el, las estaba besando a ellas, no lo veía a el... las veía a ellas... esto era espantoso!

Debía haber una solución!, tenia que haberla, besé con desesperación los labios de Myhr intentando sentir algo.. un cosquilleo...el deseo... la pasión... cualquier cosa!. Apreté con fuerza su cuello, me estaba comportando de manera exagerada y brusca. La desesperación me sofocaba... olvídalas!!... azul... ojos azules... dos pares de enormes ojos azules, cabellos rubios, cabellos castaños, piel blanca... una loba gris... una escapada, un cigarrillo... argh!!!!... piensa en hombres Mimi!, hombres desnudos, hombres desnudos, hombres desnudos!

Tenia que olvidarlas, haría cualquier cosa para borrarlas de mi cabeza hasta lo que estaba haciendo en ese momento. Me senté encima de el tratando de sentirlo tratando de hacer algo solo por despecho, me tomo de la cintura, su calor era intenso me asfixiaba, intente arrancarle la camisa pero con una mano era difícil, el se la quito, me tuve que separar de el unos momentos para poder respirar, mi cuerpo sudaba, me molestaba la pesada ropa con la que vestía, lo miré por unos segundos... el es bello, anda!, tu no eres lesbiana!!!... las volví a ver y eso me puso peor. Me abalancé sobre el besándolo con frenesí... como si esos las quitara estúpida!!!... puso sus manos en mi cintura atrayéndome hacia el, sentía sus labios ardientes besándome profundamente, una gota de sudor recorrió mi frente. Me quite la remera, con dificultad.

-me estoy ahogando Myhr- susurré, me acerque a el para besarlo nuevamente, mis labios desesperados buscaban los suyos para eliminar todo vestigio de lesbianismo pero no lo conseguía, era algo que sobrepasaba mis limites. Me pegue más a su cuerpo, otra gota recorrió mi espalda.... me sentía tan estúpida haciendo todo esto.

Continuamos besándonos otros minutos no sentía absolutamente nada, estaba que reventaba de la ira. Se separo de mi y hablo. ¿qué si estaba segura?, me separe un poco más de el, mirando sus ojos... la confusión me invadió nuevamente, no estaba segura, ni siquiera sabia porque estaba haciendo esta locura, tenia tanta calor... pero no de ese tipo de calor del que andaba buscando... me paré alejándome por completo de su cuerpo... fui por una botella de ron y le di un gran sorbo, no tenia para que responder a su pregunta con eso ya era obvia mi respuesta.

Me seque con mi mano el sudor de mi rostro, volví a empinarme la botella de ron, camine hacia la ventana, no me molestaba andar sin blusa delante de el, sabia que no le gustaban las mujeres, como a mi no me gustaban los hombres... yo lo había utilizado y el me había dejado hacerlo. Saque un cigarrillo de mi bolsillo, dejando la botella en el piso, lo prendí y le di una bocanada.

-lo siento- dije sin voltear a verlo, estaba demasiado avergonzada...