Retorno (Libre)

Habia pasado una semana desde mi primera inasistencia a clases.

Me pregunte si alguien me habia extraniado, me rei ante la idea. Era imposible...
era triste.

Recorde mi ultimo contacto con alguno de mis "companieros".
Aquella...metamorfosis de Testament, las frias palabras de Jesse...almenos esperaba que el estuviera mejor...la imagen de Katherine y esa criatura magica.

Sacudi mi cabello suelto mientras ingresaba al patio escolar, fijando mi atencion en la gente que me rodeaba...tan sucios, pecadores, ingenuos e ingorantes de la suerte que les deparaba. Lamentaba haber perdido mi crucifijo, pero eso no me impedia el estar tan cercana a Dios.
Abraze mi mochila de lado con delicia, sabiendo que en ella guardaba todo lo necesario para "limpiar" esta sociedad, solo seria cuestion de colarse en la vida de los demas, de meterse en la cafeteria, de esperar.

Pero debia ser paciente...un brote de envenenamiento no podia surgir de la nada, debia tener un origen...una causa.
Quizas, si comenzara con un par de alumnos, y despues se contagiara...alumnos que fueran sociables.

Alumnos como...Testament.

Continue avanzando absorta en mis pensamientos, cuando escuche que alguien me llamaba.
Gire para encontrarme con alguien conocido.

Acababa de despedirme de Katherine, generalmente nuestras clases no coincidían pero yo comenzaba a tomar la costumbre de acompañarla. Quizás la paranoía comenzaba a apoderarse de mi luego del incidente con aquellas dos extrañas personas y Anna, a quien no había vuelto a ver desde hace días.

Estaba casi seguro de que ella no iba a volver, no tendría el valor suficiente para enfrentarse a ninguno de nosotros después de lo que había hecho y después de ver que Testament tampoco era un chico que entraba dentro de la clasificasión "normal".

Pero al llegar al patio inmediatamente la vi, caminando por entre los demás estudiantes como si nada. Me preguntaba si alguna de las personas que estaban ahí sabían lo que era. Por mi parte, luego de lo que había pasado, la tomaba como una chica con la que se tenía que tener cuidado, nunca sabías qué podías esperarte de ella.

Observé su mirada, que iba de un lado a otro, y su extraño gesto para con su mochila. La llamé por su nombre casi involuntariamente, no era lo que pretendía. Pero cuando me di cuenta de eso había sido demasiado tarde, ella se había volteado hacia mi.

Caminé hacia ella, en silencio, esquivando algunas personas que iban en dirección contraria hacia mi hasta pararme en frente de Anna.

-me sorprende verte por aquí, pensé que luego de lo que viste el otro día no ibas a volver -me reí, recordando su rostro luego de ver a Testament esquivar la bala tan limpiamente-... ¿Qué pretendes hacer ahora? ¿intentarás disparar a un desconocido para ver si esta vez tienes suerte de que se trate de un humano?.

- Siempre es dificil matar a un demonio con una bala..- dije acostumbrada al sarcasmo de Nicholas, o quizas era el rencor por haberse robado a Katherine - pero no imposible...jeje -

Lo mire a los ojos para cerciorarme de que continuaba en ellos el matiz rojizo caracteristico de los vampiros.

- Asi que..tu y Katherine...- preparaba mis palabras cuidadosamente, buscando el punto perfecto para atacarlo. No es que quiziera lastimarlo, pero no estaba segura de si la Belladona tambien funcionaria con vampiros..y en caso de que no, debia mantenerlo ocupado en otras cosas, y evitar que descubriera mi plan.

- Es facil resistirse?.... o piensas convertirla en una como tu?...- no necesitaba mas explicaciones, el sabria a que me referia. - despues de todo...no deja de ser una fragil, sencilla, debil humana...no era eso lo que opinabas de nosotros?...- le sonrei con hipocrecia, burlandome de el casi - no era que, acaso, el gran Nicholas se paseaba por la escuela pretendiendo ser demasiado?...que no tenias sentimientos?...que eras frio como el hielo?...al final, tenia razon, tu estabas equivocado....al igual que los humanos, tienes sentimiento..no eres mas que un vampiro humanizado...- lo mire como miraba a la gente a mi alrededor, con desprecio, con desden...estaba a punto de darme la vuelta cuando surgio en mi mente una pregunta - de casualidad... no sabras donde se encuentra McGrown? - la pregunta salio de mis labios sin pensarla...victima de las ansias por saber si me habria extraniado, aunque fuera un cuarto de lo que yo a el.

La miré inexpresivo, sabía que buscaría la forma de hacerme perder la paciencia y ahora que sabía lo de Katherine me imaginé que de alguna manera tendría ciertas cosas para decirme. Internamente deseé matarla allí mismo, estaba cansado de ella y lo que dijo en cierta forma me dolió, no porque haya salido de su boca, sino que día a día se me cruzaba por la cabeza aquella realidad de que Katherine era humana y teníamos tantas cosas que nos hacia diferentes.

¿Acaso Anna no había aprendido que conmigo no tenía que hablar de más? ¿no le había hecho suficientes cosas como para que aprenda a respetarme?... Evidentemente no... o quizás era de esas personas que nunca aprendían.

-yo también pensaba lo mismo, pensé que era una criatura incapaz de querer a nadie, pero luego de que llegó Katherine me di cuenta que estaba buscando algo que los demás nunca tendrían y que sólo ella podría darme. Todos los que me rodean aquí son nada, son insignificantes humanos... incluso tú, Anna... eres nada -quería herirla, verla llorar en ese momento-... eres una pobre persona que lo único que busca es hacerle mal a los demás constantemente. Estas vacía y no vales un centavo... -esbocé una media sonrisa-. Pero Katherine no es como todos ustedes, lo sé y tú también lo sabes... incluso le tienes envidia, sabes que ni siquiera mereces besarle los pies...

Su repentino cambio de tema me dejó extrañado.

-no sé quién es -le respondí de inmediato. Esperaba que no encuenre a la persona que estaba buscando, por su propio bien.

- Y..sin embargo...al final volveras a quedar solo...cuando la veas fallecer entre tus brazos..cuando la veras agonizar...con su ultimo aliento, su ultimo grito...- sonrei - es mortal..cualquier cosa..cualquier situacion podria acabar con su efimera existencia... y a donde su alma iria...jamas podrias seguirla... Estas condenado a una vida eterna, si es que se le puede llamar a eso vida...- me arregle el cabello, me estaba dejando llevar por el entusiasmo del saber que tenia la vida de tantos a mi merced.

- Cuando el dia del juicio llegue... tambien tu seras juzgado - le dije puntualizando mi idea de que pronto la sociedad conoceria el verdadero significado de la palabra "Fe". - Y dado que no lo conoces, no tengo mas que hacer aqui...si me disculpas Nicholas, tengo cosas mas importantes que hacer que gastar mi tiempo a lado de un animal... - di media vuelta nuevamente adentrandome en los pasillos de la escuela.

Me quede pensando en sus palabras...se notaba que amaba a Katherine, pero estaba segura de que - por mas que ella tambien lo amara- el jamas estaria a su alcanze...jamas podria hacerla feliz. Despues de todo se trataba de un demonio, y yo queria que Katherine sobreviviera al final...el seria tan solo un inpedimento en su salvacion....

Debia hacer algo para separarlos si queria que Katherine continuara con vida.