Un Café para espantar el sueño...(ike)

Llegamos al Black rose, habiamos estado hablando de música todo el camino y Ike me parecía....muy interesante por decirlo asi.

Parqueé casi lelvandome el andén pero a salvo y me bajé del carro.

-A que no manejo taaan mal

-No, comparando con las demás chicas, manejas bastante bien- Decir que mientras hablabamos, escuchabamos música escandalosa, manejando y sin estrellarnos, era un verdadero milagro.

Rodé los ojos y entré con él al café, sentandonos en una mesa esperamos a la camarera.

-y haciendo un cambio brusco de tema....¿no se supone que tienes que pasar un tiempo en observación y todo eso?-esperaba que no le molestara hablar del tema y que no le molestara mi curiosidad.

-No, ya los hice, el tiempo era mes y medio, pero viendo que podía desarrollar sin problema alguno mis actividades "rutinarias", no tuvieron otra opción que dejarme ir- Adoraba la libertad que me brindaba el poder escapar de ese hospital.

-Es difícil contenerme cuando me propongo algo-

-y has logrado todo lo que te has propuesto?-pregunté

El camarero llegó y ordené

-Yo quiero tres cafés calientes y cargados en vaso, no en taza por favor, y tu ike?

-Realmente no, hablar con Elliot es la punta del iceberg, después darle una buena lección a los idiotas que lo inculparon, y finalmente recuperar mis dos años perdidos de escuela- Miré a la camarera.

-Un café de vainilla francesa porfavor-

la camarera se fue con nuestra orden y yo le contesté, había algo en esa oración que no me gustaba.

-Ike...no creo que hablar con Elliot sea difícil, ya te dije que no creo que te odie ni nada de eso, y me parece super que quieras volver a la escuela, pero no estoy de acuerdo con que busques a nadie para vengarte o darles una leccion, como sea que quieras llamarlo, puedes salir herido o...incluso si les haces algo, no te va a dar algun alivio, solo te vas a llenar de odio...y vas a perder de vista lo que importa.

va, parecía que le estuviera dando un sermón, pero...no podía dejarlo hacer eso de todas formas.

Me puso a pensar lo que fue su "sermón"; era como una cadena de odio, aunque de igual manera, seguiría enojado con ellos, les hiciera o no algo.

-Esta bien, lo de hablar con Elliot no lo veo como un problema, regresar a la escuela tampoco, y respecto a lo de los tipos...te aviso que no soy el único disgustado, de igual manera, aparecerán en algún momento con todo y boxers colgando en un perchero, probablemente en la sala de profesores...cuando me refería a una lección, solemos hacer bromas-

-Mira, a veces, las bromas se salen de control y sé que no tengo velas en este entierro y que soy una entrometida, pero me parece que lo mejor que puedes hacer es alejarte y empezar de nuevo.

Comencé a tomar de mi café, sin preocuparme de si estaba caliente o no.

-Ok, pero no te enojes conmigo cuando te enseñe en un blog a un par de cabezas huecas colgados en unos percheros y pintados de amarillo...- Reí con tan solo imaginarmelo. Tomé del café...¿porqué se preocupaba por mí si apenas nos conocíamos? La pregunta me causaba una intriga total.

No pude evitar reir con él...la imagen mental que se me vino a la cabeza me quitó toda la ilogica preocupación que sentía por él...

-Vale...perdona si soné como mamá regañona...a veces me pongo de un loco...-continué tomando mi café.

-Esta temporada será la mejor para hacer bromas, lo presiento...- No le había comentado a Anne que en el excusado de aquellos idiotas tenía una trampa, apenas lo abrías y desde arriba te disparaban bolas de pintura...oh, que dulce es la venganza...y el café; volví a tomar de él.

-Mmm posees una mente macabra...-reí- creo que el café ya te está haciendo efecto...aunque no te puedo negar que yo sin café no soy nada...es un regalo de los dioses.-dije mientras miraba el primer vaso vacío de café.

-Y el chocolate de los aztecas- Reí. -Elliot es un chocomaníaco, creo que tú y él se llevarán bien en ese aspecto- Me ilusionaba el poder verlo...Anne seguro le contaría que fui, eso arruinaba el elemento sorpresa.

-Por supuesto que si...yo sé preparar el chocolate Heaven que ha pasado de generacion en generacion...y no sé cuantas veces he dicho eso ya en los ultimos tiempos-reí-porque me la paso invitando a todo el mundo a que lo pruebe, pero tienes razón, entre chocomaniacos nos entendemos..-concluí despues de hablar lo más aceleradamente que pude, una costumbre que ya era inevitable .

Sus palabras me recordaron a Elliot, ¿debería decirle que su hermano estaba aquí?. Si. ellos dos necesitaban hablar...por alguna razón quería que los dos fueran felices, que dejaran atrás todo ese dolor que sentian.

-Dime algo: ¿que piensas tu que los hace diferentes?

-Qué yo soy más guapo...- Reí por la broma- No, soy más atlético, él una combinación de todo...siempre encaja bien en cualquier grupo por alguna u otra razón, a mí me gusta destacar, en cambio él prefiere el bajo perfil- Las diferencias entre nosotros eran muchas. -Es más estudioso, perseverante y responsable a comparación mía, yo suelo hacer más desastre que él o meterme en problemas- Seguí pensando. -Respecto a actitud es eso, con los gustos, creo que ahí somos tan diferentes que mejor sería preguntar- Volví a reír.

Escuché y no pude evitar sonreir cuando dijo que era más guapo...
De por dios niña!! que estas pensando???
Era algo extraño reganarme a mi misma, meditaría al respecto despues, lo seguí escuchando.

-Bueno, pero por algo se empieza, mi nuevo proposito será nunca confundirlos de nuevo.

-Sí buscas apariencia física, por lo general casi nunca me peino, Elliot es más vanidoso con su cabello- Me gustaba fastidiarlo diciendole cosas como "metrosexual" o que gastaba kilos de gel para un solo día.

-Aún así es divertido cuando nos hacemos pasar por el otro-

Reí.
-Lo sé..he visto su baño...-volví a soltar una carcajada

-A mi nunca me van a engañar-le dije poniendo una expresión confiada que probablemente solo yo me creía- Aunque...¿a poco y han hecho como en las peliculas y uno hace el examen del otro?-pregunté con curiosidad

-Elliot tuvo una lesión en un tobillo cuando jugabamos futbol americano...no podía presentar un exámen físico, y yo no me sentía en confianza con la prueba que nos hacían en historia, por lo tanto, cambíamos de roles...nunca se dieron cuenta, además de que nos ayudamos entre los dos para aprobar de buena gana el año- Esperaba a que no me regañara por eso u otro sermón, aunque todo iba al mismo punto, era malo y no debía arruinar mi vida así.

-Un día de estos te engañaremos, tenlo por seguro- Éramos él y yo como Lindsay Lohan en "Juego de Gemelas", sabíamos tanto del otro que podíamos actuar como el otro y ni cuenta se daban.

Sonreí con la anecdota.

-Aww...yo siempre quise una gemela para hacer lo mismo, una gemela que fuera buena en matemáticas definitivamente...-suspiré-me parece que este año tendré que ir a la escuela de verano...-dije resignada.

-¿quieres apostar?-pregunté desafiante aunque volví a reir

-Por mí está bien...si descubres que nos hemos cambiado, te llevo de compras en mi jeep; sí, me lo traerán pasadomañana cuando mucho- Sonreí, desafiante como ella.

-¿Y sí tu pierdes que?- Me apoyé sobre la mesa con los brazos cruzados.

compras....pensé al mejor estilo de homero simpsom, definitivamente la apuesta iba...

Yo estaba recostada en la mesa, tomando perezosamente mi café, lo miré a los ojos mientras le seguía diciendo con el mismo tono desafiante.

-¿tu que quieres?-pregunté levantando una ceja...de donde sacaba el valor para decir eso de esa manera...solo Dios sabía

Me lo pensé detenidamente...

-Raptarte toda la semana para que me lleves a los lugares interesantes de aquí...un tour de tooodo el día- Sonreí. -De igual manera, eso te lo puedo pedir un día de estos, así que mejor lo tomo como una petición, no, lo que entra en la apuesta sería que cantaras una canción solo para mí...-Volví a sonreír, pero de forma maliciosa; me tomé de golpe todo el café que había en la taza.

Tomé un sorbo largo de café, sopesando mis posibilidades, no estaba mal...era algo que estaba dentro de lo que haría en condiciones normales...

-Bien, tenemos un trato-sonreí- aunque la idea de secuestrarme toda una semana va bajo tu propio riesgo, no se si has notado que estoy un poquito zafada...