Una buena lectura. *libre*

Despues de algunas clases me dirigi hacia el Starbucks, para tomar uno de mis capuccinos favoritos. Llevaba conmigo un libro (El cuento número 13)el cual me tenia con insomnio por no dejar de leerlo: suspenso, mi gran delirio.
Me dirigi hacia una de las mesas donde podia ver pasar a los demas estudiantes, tome un sorbo de mi cafe y comence a leer donde me habia quedado...

Llevaba varios días sin haber visto a Ari, esa chica me caia demasiado bien, como habia intuido tal vez se encontrara en la universidad, esta vez comensaria a buscar por el starbucks, a lo mejor y a ella le gustaba el cafe, al entrar me alegro mucho el comprobar que se encontraba ahi muy concentrada en un libro.
Me acerque sigilosamente hasta donde estaba dando un salto para quedar completamente enfrente de su mesa.
-¡Hola Ari!- la salude con voz muy alta- cuanto sin verte, esperaba que nos reencontraramos pronto- dije con sinseridad- y...¿como has estado?-...

Continuaba con mi lectura en silencio pasando una hoja tras otra. Habia leido ya un buen tramo cuando una vocesita algo chillona me asusto al saludarme e hizo que se me cayera el libro. Me di cuenta de que era Deidre, le sonrei con amabilidad mientras me agachaba a recoger el libro.
-Hola Dei- le dije con cariño- si ya ha pasado mucho tiempo.
-He estado bien gracias- respondi a su pregunta, buscaba la pagina en la que me habia quedado.

Mire muy apenada como se le habia caido el libro a Ari, cuando lo levanto y comenzo a pasar las paginas sonrei levemente.
-Perdoname- me disculpe- no era mi intención asustarte en verdad lo sien.....- en ese momento un hombre con aspecto claramente de nerviosismo se hacerco a la mesa, lo mire esperando que dijera que se le ofrecia, me sorprendio el ver como trataba a Ari, tambien me ofendio un poco el que no reparara en mi presencia.
Me cruce de brazos muy molesta y garraspee un poco.

Seguia buscando entre las paginas oyendo su timida disculpa.
-No te preocupes- le dije para que no se lamentara tanto cuando paro bruscamente de hablar.
Levante la vista y vi a Dean, lo salude con una inmensa sonrisa, me daba mucho gusto el volver a verlo. Se me hizo un poco raro que actuara con mucho nerviosismo.
-Bueno ya tomaste asiento- le hice la observación cuando hizo la pregunta y sin esperar respuesta se sento- yo he estado bien, gracias por preguntar- seguia con una gran sonrisa para el- ¿y tu que tal?- pregunte con interes. Oi que Dei garraspeaba, habia sido muy maleducado de mi parte el no presentarlos.
-Primero, Dean ella es Deirdre, Deirdre el es Dean- los presente haciendo señalamientos con la mano.-

Respondi con menos disgusto a su saludo estrechado su mano, me llamaba mucho la atencion que le ponia a Ari, viendolo con la suficiente suspicazia se podia decirq eu a el le gustaba ella.
-Por eso no hay problema, casi nadie me nota- susurre de lado, escuche lo que le dijo a mi amiga y no pude evitar reir a todo lo que daba, se notaba que ella y yo ahora mas que nunca debiamos hablar de ese caso en particular, al igual que el fije mi vista en Ari alzando una ceja con curiosidad y ansias-...

Rei suavemente cuando me recordo la ultima vez, esa habia sido la mejor experiencia que habia tenido en la vida, no solo porque me encontraba solamente con el, sino que tambien por haber conocido distintos lugares.
-Si, me gustaria volver a salir contigo- respondi enseguida, no dudaba que el rato que podia tener con el fuera de lo mas divertido.
Mire disimuladamente a Dei y le sonrei timidamente, en ese momento recorde que a ella (ni alguna otra persona) le habia dicho nada sobre Dean.
-¿No te importa?- pregunte dirigiendome a Dei esperando que en verdad no le importara ni le incomodara, después tendría todo el tiempo del mundo para platicar con ella.-

Suspire con un aire de irritación, estaba claro que lo que tenía que hacer era cambiarme el nombre, bueno ya que, por otro lado...me podia ir despidiendo de la salida que queria tener con ella para ir a algun lado, era raro el solo tener una amiga o lo que se le podia decir amiga las demas eran de chocolate.
Una vez que se fue Dean comence a hablar muy aprisa-Vas a tener que soltarlo todo de una vez si no quieres que me ponga en verdad de malas- le adverti tomando asiento y mirandola mientras recargaba mi barbilla entre mis brazos- ¿que es de ti?- sabia que era algo directa con las pregunta pero no me importaba era divertido el tener que hablar con ella-...