Lo prometido es...una gran deuda para mi(Alessa)

Eran las 8 pm puntuales, llevaba una gorra desordenada, unos jeans cortados y una remera rallada con golondrinas. Era normal en mi vestir asi.

Spoiler:

Habia quedado con una posible nueva amistad en encontrarme a esa hora en la puerta de su hotel. Sin embargo tal vez ella lo abria olvidado o no se lo abria tomado en serio. Espere con impaciencia apoyado en una pared.

La verdad es que no sabía si Sony vendría o no. Aún así me preparé para la cita. estaba deseosa de salir del hotel, no conocía mucho a este chico, pero se notaba que sus intenciones eran, quiza no las mejores, pero buenas.
Abrí mi maleta (aún no desempacaba todo) y escogí una corta falda de mezclilla, la que combinaba perfecto con una lijera polerita blanca con tirantes.
Nunca se me ha dado bien eso de escoger zapatos, pero creo que acerté al elejir unos negros, con pequeñas hebillas y tacones altos.
Llevaba el cabello recogido en un improvisado moño sujeto de una vara, me puse mi perfume francés de frambuesa y bajé al hall del hotel.
Al bajar las escaleras, lo ví ahí parado muy tranquilo, en el momento en que volteó a verme, quité la vara de mi cabello y meneé la cabeza.
Sony me miraba con la boca entreabierta, muy sorprendido, sin decir palabra.
- Hola Sony- dije, esperando que no me dijera que parecía una ramera.

(off: lo siento cariño...! estuve hospitalizada un buen tiempo siento haberte dejado botado!
me perdonas?? )

Waau, esperar definitivamente había valido la pena. Alessa bajo las escaleras del lugar vistiendo de manera increible, si me quería provocar, lo había logrado. Se me acercó y me saludó como evaluandome.

-Alessa, estas...wow, preciosa!- Dije de manera titubeante, me sentí un vagabundo al lado de ella-Vamos?
Tomé su mano y la arrastré fuera del lugar, podía percibir también un aroma dulce exquisito que ella emanaba... Definitivamente tenía que llevarla a algun buen bar... ella no se había vestido asi por nada.

Sony me tomo de la mano y salimos del hotel. Caminamos un buen rato, yo lo miraba todo el tiempo, lo que le parecía avergonzarle ya que cada vez que nuestras miradas se encontraban me evitaba...
Llegamos al lugar, un precioso bar del centro ya estaba harta de los restaurantes a los que me invitaban, me agradaba que Sony fuera tan informal, con el podia ser....Yo.
al sentarnos ví como se encendían las primeras luces de las calles y de las casas.
Lo quedé mirando fijamente con una sonrisa.
- Cuentame de tí.