Cocinando como en la TV... (Brody)

Caminé s despacio siguiendo su efluvio, la encontré en la cocina donde revisaba las alacenas, me pregunté desde cuando sabia cocinar, porque hasta dónde tenia memoria, no sabia nada de cocina, había aprendido en la televisión algunas cosas para prepárale algo a Freda, aunque siempre ella era la que terminaba haciendo su comida.

Tomé su mano para que dejara lo que estaba haciendo, le haríamos una cocoa, o un consomé, seguro había algo en la alacena, que estaba repleta, siempre William debaja todo equipado en esta casa.
-Brody, necesitamos hablar. –la miré donde podía notar mi reflejo en sus ojos- Freda mordió a una chica por accidente, ahora esta chica está en observación y es muy probable que se una a nuestro clan, se llama Amaltea Fromm, la debes de conocer, trabajaba para nosotros en el local.

Imité un suspiro idéntico a un humano…
-Freda tiene los ojos color carmín debido a esto, y su debilidad por la sangre humana es más intensa, no puede estar libre o podrá matar a André… aquí debajo de todo esto hay unos pasillos donde hay una zona aislada, ahí está ella, te enseñaré donde está, hay que ir a hablar con ella y llevarle mucha sangre, ahora estoy seguro que me debe de odiar, tal vez hasta me guarde rencor, no lo sé, pero conociéndola, no será lo mismo.

Habia prometido a André prepararle un chocolate caliente al llegar a casa, no tenia idea de cómo hacerlo, pero nada perdia con intentarlo, habia visto a algunos humanos hacerlo, no parecia tan complicado.

Estaba buscando en las alacenas, cuando él apareció.

Su mano estaba fria, como siempre, no me sorprendia la temperatura de su piel, era otra frialdad la que me preocupaba.

-¿¿Amaltea??, claro que la conozco- mi voz se perdió con mi mirada, ella estaba con nosotros en el bar, y pertenecia a mi banda... la banda que nunca hizo su debut, vi más lejos ese momento.

-Pero ¿como sucedio? Freda se veia tan controlada? cómo perdió los estribos??- llevé la mano hasta una de mis sienes, para presionarla.

-Quiero verla, debe estar asustada, no lo sé!!- me sentí alterada, las cosas daban un giro extremo de nuevo, pero yo podria con esto, sé que podría.

Me topé en mi desesperación con los ojos de Laurent, estaban alejados, tuve ganas de llorar, odié no poder llorar.

-Tranquila –la tomé de ambas manos- Te llevaré con ella, lo prometo. Todo pasó de la manera mas extraña, no se con exactitud, solo sé que Fromm provocó a Freda y ella se descontroló. –miré hacia otro lado soltándola- Destruyeron el local, todo estaba cayéndose a pedazos, tal vez eso influyó, llegué justo en el momento para separar a Freda de la muchacha, pero no fue fácil, la llevé con la Dra Blanchard para que ayude a salvarla, pero fue demasiado tarde.

Volví mi mirada hacía ella, con una media sonrisa, me daba mucho gusto que haya venido, me acerque a besarle una mejilla cerca de la comisura y luego le dije:
-Preparemos algo para André, Freda está bien, no se irá a ninguna parte.
Saqué unos botes de leche, canela, chocolate, cocoa, azúcar, justo como lo había visto una vez en la televisión…

Notaba cierta calma en sus ojos, eso de alguna manera me relajó, prometió que veria a mi hija en poco tiempo, entonces ella estaba bien, sólo habia que separarla, aislarla, si es que no queriamos correr peligro... con el aroma de André en casa... imité un suspiro.

Miré nuestras manos juntas, tal como antes, el encanto duró poco,él me soltó cuando apenas asimilaba su movimiento.

Tenia aun muchas preguntas, ¿quién era la Dra? ¿de donde la conocia?, odiaba ser tan celosa, y más ahora que temia que tarde o temprano terminaría perdiendo a mi familia y a él.

-Le dije a André que le prepararía un chocolate caliente- dije cuando noté que él parecia haber leido mi pensamiento, dudé y me dirigí hasta la estufa.

-¿cómo se usa esto?- movi todas las manijas y olor extraño comenzó a salir, olia a gas, miré de reojo a Laurent.

-Opss, creo que hize algo mal- me rei levemente, disfrutaba estar a su lado, después de todo.

Me acerqué enseguida a girar los fogones. El olor a gas me estaba mareando, abrí las ventanas y se sintió una ventisca y sonreí un poco de lado:
-Veamos, empecemos con la leche y luego se le agrega la cocoa –puse un bol de metal sobre la estufa ya hora si puse el fuego bien, emepcé agregar los ingredientes en algun momento nuestas manos chocaron y reímos al menos la tensión se había desvanecido- después de esto te llevaré donde Freda...
Moderé el fuego y mezclé con un cucharon, me estaba volviendo exerto en estas tonterias humanas, no lo podia creer. Lo que pasa cuando no tienes que hacer y te la pasas viendo el canal gourmet en lugar de leer un libro, definitivamente esa caja idiota me tenia en una frecuencia diferente. Después de unos minutos, estaba listo, lo serví en una taza.
-Listo, ahora podemos llevarlo para que se recupere ese muchacho, espero sea de ayuda.

El aroma era delicioso, de nuevo tenia recuerdos humanos, eso me hizo reir por instantes.

Tuve ganas de beber un sorbo del liquido, pero no serviria de mucho, me dispuse a sólo olerlo.

Tomé la taza, y noté a mis espaldas, mientras caminaba, la pulcritud de la cocina, Laurent solia hacerlo todo bien, parecia todo un experto, agradeci que no me dejara sola en esto, le sonrei levemente.

En el camino hasta donde André, me giré con una nueva duda en los labios.

-Después de que pase lo de Tea, ¿qué pasará con André?, no podemos mantener por mucho tiempo a un humano en estas paredes.... - me quedé estática, pensando en las posibilidades..

Escuché sus pregunta… me quedé pensando uno momentos mientras continuábamos nuestro camino hacia donde estaba Marion y André.
-Ahora será difícil, con una neonata y con Freda que está descontrolada, tendríamos dos neófitos a quien debemos educar, creo que André será mas consiente, pero Amaltea presiento que será más difícil.
Pensé en todas las opciones que teníamos y le dije:
-Le pediremos a Marion que nos ayude, ella es una compañera dela universidad, y me siento mal de haberla involucrado, casi no nos conocíamos solo por las juntas mensuales con el rector, pero ha sido de gran ayuda con sus conocimientos de medicina, de lo contrario, Amaltea había muerto hace tiempo.

La respuesta no me dejó del todo conforme. Asentí levemente para despues continuar con mi camino hacia el humano.

-Será como tenga que ser, más vale no seguir esperando, entre más tiempo sea humano, más me pone los nervios de punta.

Mi voz se perdió junto con mis pasos, no supe si Laurent me siguió o no.

Era hora de transformar a André.