La nueva Heroína de mis Comics Willow Kennedy

Después de al fin terminar con ese catarro y una buena inyección de benzatina con penicilina, gentileza de mi querida y demoníaca hermana futura enfermera, heroína de la medicina y villana de las inyecciones, me sentía mucho mejor. Listo para ir a montar unas cuantas olas, tenia que entrenar o el campeonato me caería encima en menos tiempo del presupuestado.

La nueva heroína de mis historietas, la defensora de animales, amante de gatos y con los ojos más hermosos que cualquier océano en el mundo… aún la imaginaba pero no sabia el motivo y tampoco me importaba iba a dejar que las olas me guiaran como siempre lo hacían.

Le mandé un email que decía:

“Willow, soy el chico gato de los estornudos xD, me preguntaba si te gustaría surfear conmigo, te dejo la invitación abierta, después podemos ir a comer algo para hablar de nuestros gatos, respóndeme si es que aceptas, será en la bahía de Port Ángeles, nos vemos… o eso espero. Saludos a Skyy”.

Estaba en la fraternidad terminado una tarea cuando el sidekik empezó a sonar, revisé y sonreí al ver el mensaje… recordé al muchacho de los virus, chequé mi agenda y vi que no tenía planes para el fin de semana, Dan me había cancelado porque tenía que hacer algunas cosas de administración de la fraternidad y que vería a su padre. Me sentí un poco triste porque no lo vería.
No sabía nada de surfeo, ni tenia la menor idea de cómo se hacía, mis hermanos eran los que le gustaban ese tipo de deportes, sobre todo a Michael, lo único que sabia era navegación, aves acuáticas y pesca.

Escribí el mensaje y le di send.

Citación :: Mensaje:

“Hola, chico gato, me gustaría ir, este fin no tengo nada pendiente, ¿Como iríamos?... ¿Nos vemos ahí o pasas por mí a la Fraternidad?..."

XoXo
Willow
=ô.ô=

Me alegre extrañamente al recibir un sí de respuesta, justo el sábado tenia libre en mi nuevo trabajo, por lo que sería un día perfecto y por lo que había revisado en Internet muy soleado. Me fui hasta mi laptop y le mandé un mensaje de vuelta

Citación :: Perfecto!
Entonces te paso a buscar a la fraternidad el sábado a las 5 am para alcanzar las mejores olas. ¿Tienes traje de Surf?. Por la tabla no te preocupes yo tengo una colección, llevaré una para ti. Cuídate… nos vemos el Sábado ^^

Matt… el chico gato

Aproveche de ver si mi hermana había dejado su traje de surf antes de volver a la universidad, había una opción de que Willow no tuviera uno, para mi suerte estaba aquí aun… esperemos que le guste el rosa tanto como a Leysla o tendremos un gran problema.

Aun no terminaba con la edición de mi tarea plastilina xD era demaciado tedioso hacer las tomas con lentitud, capturaras, mover, digitalizar etc, la edicion me estaba dando mucho trabajo y me llevaba mucho tiempo. Lo dejé y empecé a editar mi blog y buscaba la manera de hakear la página de la fraternidad y arruinarle un poco sus cosas a Jal, o más bien ponerla en aprietos. Sonó de nuevo el sidekik y lo revisé era el chico gato, 5 de la mañana era demasiado temprano ¿surf?... enseguida le respondí y mandé send:

Citación :: Hola chico gato xD
Te espero entonces a las 5 el sábado… ¿Qué es traje de surf? ¿Cómo se come?
Ha ha ha XD….
Hasta el sábado.

Xo xo
Willow

Genial, estaba teniendo un sexto sentido para leer mentes al igual que Iron Matt, si no sabia que era un traje definitivamente no tenia uno, reí para mis adentros, le mande el ultimo mensaje de vuelta

Mail:

Citación :: “No te preocupes yo llevo uno para ti, nos vemos el sábado Willow.

Matt.”

Los días pasaron lentos, yo estaba más ansioso que Billy por sacarse los mocos. Justo me habían admitido en la misma fraternidad de Willow, pero aun no la había visto con el trabajo y los estudios no tenia casi nada de tiempo para sociabilizar. El día anterior fui a buscar 5 tablas de Surf a mi casa y los trajes. Cuando al fin llego el día puse el despertador a las 3 a.m. Me bañe, vestí, perfume, coloque las tablas de surf arriba de mi coche, metí los trajes dentro del carro, y unos cuantos dulces de chocolate, además de aperitivos por si a la heroína rescata gatos le daba hambre, y después de todo eso aun me quedaban 15 minutos libres, ahora solo tendría que encontrar la habitación de Willow.

Un tipo en pijama salio de uno de los dormitorios, aproveche y le pregunté. Quedaba a 5 cuartos de distancia del mío, volví a mirar la hora, cinco minutos. Esperé afuera de su cuarto hasta que dieron las 5 a.m. Toqué la puerta un par de veces.

Sonó el despertador muy temprano, me di una ducha y me alisté para esperar al chico gato, que por lo que recuerdo su nombre era Matt Preston. Alisté mis cosas en mi bolsa, biloculares, bañador, bloqueador solar, lentes de sol, ipod, bocadillos, galletas, botella de agua, libro para aves, manga japonesa, muda de ropa, sandalias, artículos varios personales, toalla, cámara y sidekik. Era muy temprano, me puse unos pants, sudadera, zapatillas, traía una gorra y los ipod en la bolsa de la sudadera. Escuché la puerta que sonó un par de veces, miré el reloj y eran las 5 en punto. Me puse de pie en y fui abrir la puerta, estaba lista.
-Que hay Matt –le dije mirándole un poco somnolienta- buen día –le salude con un beso en la mejilla- tu dirás…-Tenía una mochila en el hombro-

Si que era muy temprano, Willow abrió la puerta somnolienta, aun así se veía como la recordaba, le sonreí apenado, yo estaba acostumbrado a levantarme a ese tipo de hora pero al parecer ella no.

Me saludo con un beso en la mejilla el cual me hizo sentir una electricidad por todo el cuerpo, nuevo dato ahora sería la heroína defensora de animales que lanza descargas eléctricas.

-Buenos días Willow- sonreí encantador -vamos al auto, tengo todo listo- en mi voz no habían residuos de sueño se escuchaba alegre y entusiasta. Le miré la mochila que cargaba -te ayudo con eso- dije mientras le quitaba el bolso con delicadeza, pesaba casi una tonelada! -¿Qué traes en la mochila?¿Rocas?- pregunté enarcando una ceja divertido.

Cerré la puerta con llave para que ningún ocioso vaya a meterse hacer sus gracias a mi dormitorio.

Asentí ante ir al automóvil, tenia la mochila en el hombro y el me la pidió, se la di. Caminamos por el pasillo de la fraternidad, algunos caminaban en el pasillo en pijamas rascandose la cabeza, otros dormian en el pasillo después de la fiesta de la noche anterior...
-¿Podríamos pasar a una cafetería en el camino? –le dije un poco somnolienta, luego me sonroje ando me dijo lo de la mochila- lo siento… si traje mi colección de rocas que no puedo vivir sin ellas – la sonrojes era notoria, pero traté de bromear también-

La fraternidad estaba hecha un lío por completo personas durmiendo descalzas y con olor desagradable en el piso, y otras caminando con pijama estirándose y bostezando. Llevaba solo un par de días en ese lugar me tendría que acostumbrar rápido si es que no quería desencajar.

-pasaremos por donde me pidas Willow, las olas no dejaran de aparecer en veinte minutos- dije enérgico, sus mejillas se tornaron rosas, lo cual la hacían ver mucho más encantadora, su risa era melodiosa a pesar de su mal chiste reí con ella, me cambie de lado la mochila de rocas, ya se me había dormido el hombro.

Salimos de la fraternidad y caminamos hasta mi auto, le abrí la puerta del copiloto como un caballero, me subí y puse su mochila en el asiento de atrás con todas las otras cosas que había traído para ese día. Me abroche el cinturón y la miré sonriente.

-¿Cual es nuestra primera parada “Willow Niña Gato”?- pregunté mientras encendía el auto.

Caminamos por el pasillo y fuimos hasta su coche (¿Cómo es tu coche?)… sonreí amable al ver si gesto de caballerosidad, vaya que me han tocado amigos interesantes, pensé ante ese acto, porque mis hermanos eran unos gañanes, solo cuando les convenía mostraban la caballerosidad, hice una mueca pensativa, cavilando que todos los hombres eran iguales.

Me subí del lado del copiloto y dejó mi mochila de rocas atrás, aunque realmente no pesaba casi nada Rolling Eyes

Me puse el cinto de seguridad. Sonreí cuando dijo niña gato…negué un poco con la cabeza:
-¿Por un café? –le saqué la lengua y vi si tenía alguna consola para conectar mi ipod- En el camino hay un Starbucks…podríamos hacer una parada técnica –reí un poco recordando las palabras de mi hermano Michael cada vez que decía eso-

Me sentía nervioso con Willow, como si viniera una ola gigante y no supiera como montarla. Le di marcha al auto, y apreté levemente el acelerador llegando a la calle, lo apreté tan solo un poco más fuerte para alcanzar los inseguros 50 kilómetros por hora. La miré precavido cuando me hablo, me daba pánico dejar de mirar la pista mientras conducía.

-donde tu quieras iremos equis o equis o- dije automáticamente a penas ella respondió. Me acordé de su firma en los mensajes, esperando que entendiera mi pequeña broma. Cuando llegamos a un rojo aproveche y puse un cd de no sé que fue el que estaba más a mi alcancé. Me aferré nuevamente al volante aterrado, cuando sentí las bocinas de los autos, ya había cambiado el semáforo. Suspiré y le di marcha al auto mientras la música llenaba los espacios.

El automóvil de Matt era un coche muy “peculiar” a comparación del mío y del Faraday e incluso que él de mi hermano. No hice ningún comentario, iba demasiado lento para mi gusto, miré el indicador de kilometraje y llegamos a 50 km/h, era demasiado lento, parecía que andaba con mi abuela Kennedy. Levanté una ceja y sonreí levemente, luego me sonrojé cuando dijo lo de equis o equis o, parecía que no sabía que significaba. A lo lejos se hacía notar una cadena de Starbucks, nos detuvimos en un semáforo y puso un cd, me agradó la música, aunque no lo conocía. Noté que se volvió aferrar al volante cuando avanzamos, conducía bastante raro.

Cuando pasamos el semáforo le dije gritando y girando el volante de una manera diestra…
-¡¡Ahí esta la cafetería!! ¡¡Por ese lado!! -sujeté con fuerza el volante sobre una de sus manos, dirigí la guía hacia el otro carril mirando el retrovisor y casi encimándome sobre de el-.

Continúe manejando precavido a cualquier cambio de los autos que andaban a mi lado, después del accidente que tuve con mi padre me daba unos nervios del otro mundo manejar, me sentía como Puro Huesos cuando Mandy lo atacaba, terror.

Miré a Willow cuando gritó, y en un movimiento ágil e inesperado tomo el volante tocándome una mano y lo giro con fuerza, mi corazón latió desbocado, estaba en shok, helado, petrificado. Ella estaba casi encima mío manobriando mi automóvil… ¿acaso estaba loca?. Apreté con más fuerza el volante y guíe mi automóvil hasta la cafetería más cercana.

La miré con pánico contenido, estaba pálido - no vuelvas hacer eso- dije con la voz seria llevándome una mano al corazón el cual estaba a punto de escapar. - podríamos habernos matado Willow Kennedy- jadeé.

Cogió el volante con fuerza y luego frenó en la cafetería. La cara de Matt parecía la de un papel pergamino, pálido como si el alma lo hubiera abandonado…
-Lo siento –dije apenada- no fue mi intención asustarte, no iba a pasarnos nada, íbamos despacio –abuelo, pensé- Anda vamos por el café, al menos ya tuvimos una dosis de adrenalina…

Estaba en shock y parecía un poco perdido, saqué de mi mochila una botella de agua y unos brownies de chocolate para que le regresara el color al rostro. Y se las dí..
-Tranquilo, no paso nada… -le toqué de un hombro y me le quedé mirando-

Después de que recuperó el aliento. Pasó por el servicio rápido con su automóvil y pedimos los cafés, de nuevo cogió la carretera al mismo ritmo que la abuela Kennedy… venimos en silencio un rato, eran las 5:30 de la mañana no había un alma en la calle y solo se escuchaba su consola con ese grupo desconocido. Tal vez se había enojado por el volantazo, no aprendo, eso me pasa por haber crecido con 3 grandulones bien idiotas.

Mi corazón latía desenfrenado, ella no sabía lo que era un accidente, no tenía ni la menor idea de lo que es estar a punto de morir por manejar rápido, traté de recuperar el aliento.

Me paso una botella con agua y brownies de chocolates, comí un poco, que poco… me devoré el brownie adoraba el chocolate en todas sus formas y ese pastelillo era uno de los mejores que había probado en mi vida.

De a poco fui recuperando el aliento la miré avergonzado, me había dado un show como ninguno, Iron Matt debilitado por la velocidad turbo.- está bien- le sonreí de medio lado suspiré y llevé el auto hasta donde se hacían los pedidos. Tomaron nuestras órdenes, nos entregaron nuestros pedidos y nos adentramos a la carretera, la música cambio. Aun mirando el camino le dije con una voz pausada recordando lo que había vivido con mi padre: -tuve un accidente automovilístico hace años y ahora soy paranoico con la velocidad- comenté, sabía que era difícil ver a un joven manejar de esta manera.

Me quedé mirando el camino mientras la canción seguía… aun estaba obscuro, el día no aparecía por ningún lado. El viento era frio y se filtraba levemente por mi ventanilla abierta humedeciendo un poco mi rostro. Realmente le había afectado lo que había pasado estaba serio y con la mirada al frente, de repente se puso hablar, le miré mientras el hablaba sin dejar de mirar el camino, ahora entendí su posición y me sentí fatal.
-Lo siento en verdad, no volverá a pasar, lo prometo.... aunque déjame decirte que manejas igual que mi abuela –traté de bromear, le saqué la lengua pero no lo miró- Mis hermanos manejan como unos idiotas y todos en mi familia son iguales, parece que ascendemos de corredores de automóviles, amamos la velocidad.

Continué con la mirada fija en la carretera, cualquier cambio de carril me daba terror, los autos me pasaban veloces y mi corazón latía con fuerza al escuchar un bocinazo de otro vehiculo cercano. Ella me respondió… eso lo explicaba todo, su ágil movimiento, e incluso su manera de bromear con el asunto, le sonreí encantador.

-tan anciano no soy- le bromeé -pero sí muy precavido- le saqué la punta de le lengua, mirándola por una milésima de segundo. La pista avanzaba uniformemente llenándose de lugareños nuestro paisaje, caras sonrientes de los madrugadores que salían a correr por las mañanas. Estábamos prontos a llegar tras tres horas de viaje. Se podía sentir la brisa marina de la bahía de Port. Estacioné el auto donde Hummy. –Llegamos- dije alegre.

*off: aquí está la canción... mis disculpas willow*

Seguimos escuchando música y le seguí haciendo bromas por su manera de conducir xD… al fin salió el sol y la brisa empezó a llegarme por la ventanilla, corrí un poco el cierre de mi sudadera y de mi mochila que traía un mundo de cosas pero todas sabía su cuento, saqué unos binoculares, me puse a ver algunas aves que empezaban a salir a esas horas tempraneras de la mañana. Bebí el café que me hizo despertar esa mañana. El recorrido se me hizo muy lento, platicamos algunas cosas, me contó lo de su padre y su accidente, no le causaba gracia la velocidad, pero por cada toque de bocina merecía que le haga burla con abuelo Preston xD. Al fin llegamos a Port, este recorrido lo hubiera hecho a la mitad de tiempo, se estacionó en un sitio parecía que conocía muy bien, visualicé más adelante con los binoculares, por ahí debía de estar el velero de Faraday.

Me bajé del auto, ya en el estacionamiento y abrí su puerta para que saliera ella también. Desmonte las tablas de surf y saqué los trajes y la ropa para la ocasión, asimismo un bolso lleno de alimentos. Estaba más que cargado, Iron Matt es fuerte, o eso quería pensar en el momento.

Inspiré profundamente dejando que el mar llenara por completo mi interior, mis ojos brillaban, era de esos días perfectos para montar olas y con la mejor compañía que podía pedir. - ¿preparada equis o equis o?- sonreí encantador.

Caminamos hacia la playa mientras el sol iluminaba su cabello que daba unos pequeños destellos, al encontrar el lugar idóneo baje todas las cosas de mis hombros. Levanté la tabla que sería para Willow y se la mostré - está será para ti, se la compré a mi hermana en Hawaii, espero que no te moleste el color-

Al fin se detuvo el coche… se bajó, agarré mi costal de piedras, guardé mis binoculares. Abrió la puerta y me bajé mientras desmontaba las tablas le ayudé con los trajes y él tenia otra bolsa que ignoraba su contenido.
La brisa era aun un poco fría por la mañana, sus ojos parecían brillar, sonreí al escuchar lo de esquís o equis o.
-Si, espero que sí porque no se nada sobre surf, espero que seas buen maestro –le saqué la lengua-
Desmontó las tablas y las llevó entre su brazo y el color peculiar, se me hizo una ternura de su parte que se la haya comprado a su hermana.
-No me molesta –dije con una sonrisa divertida viendo aquella tabla de un color rosa con lila- ¿Qué edad tiene tu hermana? –Pregunté con curiosidad-

Sonreí complacido, su rostro era delicado y sus ojos hacían juego con el mar, no me consideraba el mejor surfista aunque en los campeonatos así me catalogaban, continúe mirándola completamente perdido en esa sonrisa que no dejaba de ver ni en mis cómics.

-haremos el intento Willow, espero que seas una buena aprendiz- sonreí mientras levantaba mi tabla. –la dueña de esa tabla tiene 8 años… su nombre es Lisa, también tengo otra hermana pero ella es mayor tiene 24- suspiré, tenia una buena relación con Leysla pero nunca estaba en casa por sus estudios. –Dame un segundo y armo la tienda de campaña para que te cambies- me alejé y comencé a montar la tienda del mismo color de mi tabla de Surf, no me demoré mucho tiempo cuando ya estaba lista. Urge entre mi bolso para sacar el traje para ella, se lo tendí –puedes cambiarte si lo deseas… a menos que sientas miedo-dije en tono burlón, sonreí encantador.

Miré hacia el mar mientras dejaba las cosas sobre la arena, luego me di cuenta que me miraba de manera extraña, arqueé una ceja y el se puso hablar:
-Soy buena aprendiz -dije le sonreí al escuchar lo de sus hermanas, vaya el con hermanas y yo con hermanos, que curioso- Yo tengo tres hermanos mayores… Gabriel tiene 27, Michael 24 y Dick 20 está en la fraternidad conmigo, en medicina.

Empezó armar la tienda eran de las que se armaban casi solas. Me dio un traje de esos extraterrestres, una vez me había puesto uno con Faraday, sonreí al recordar esa ocasión, la verdad fue una salida especial.
-No tengo miedo –le dije agarrando el traje y metiéndome dentro de la tienda para cambiarme de ropa, no tarde nada cuando ya estaba afuera con el traje de tonos rosas, tal vez era de su hermana también, me quedaba a la medida –me siento como un extraterrestre… Venus llamando a tierra, creo que aterrizaremos en pocos minutos – me moví como un alien robot xD y reí de mi tonta broma-

Hermanos, eso podría ser un problema, pero lo que jugaba a mi favor era que tenia una buena relación con las personas, la espere impaciente mientras se cambiaba y cuando salio la miré con los ojos desorbitados, ese traje le quedaba mucho mejor que a mi hermana, quizás porque Leysla era mi hermana, y ella definitivamente no lo era, reí con ella pestañando y despertando del ensueño, ya ese calido tono rosa se había marcado en mis mejillas.-

- mi turno, Marte necesita cambiarse-dije en tono robótico, sonriendo y me metiéndome a la tienda, me puse mi traje en un par de minutos, salí dando un salto y posando como superman. – listo equis o equis o- guardé todas las cosas dentro de la tienda. Tomé mi tabla, y comencé a correr hacia la playa – sígueme si puedes linda- grité fuerte mirando sobre mi hombro y asegurándome de que ella venia atrás.-

Lo esperé mientras miraba con mis binoculares a mi alrededor, el sol apenas era sutil y la brisa era fría… me quedé un rato mirando algunas aves que se detenían en las orillas del mar. Di un brinco al mirar que salió de la carpa y posando, reí un poco y guarde mis binoculares…
-No me digas equis o equis o –le di un leve golpe en el hombro cuando sonrojandome levemente, dio la carrera me quedé parada sin saber que hacer y lo imité cogiendo una tabla y lo seguí… aunque no era muy diestra lo intenté pero me llevó ventaja un buen tramo. El estaba en la orilla de la playa... Llegué tirando el bofe, los deportes no era lo mio xD..
-¿Ahora que sigue? -romperme un hueso? pensé mientras le saqué la lengua

Corrí hasta la orilla de la playa llegando allí, me voltee y la miré con una sonrisa traviesa en mi rostro, no era muy buena con los deportes y la tabla sufría sus consecuencias. Me acomode el cabello que el viento había despeinado, arrastrándolo hasta atrás.

-ahora a meter los patos al agua Willow- musité, con una risa armoniosa. Tomé su mano esperando que eso no le molestara y nos adentramos en la playa de la mano hasta que el nivel del agua me lo permitió. -ahora te subes a la tabla, como yo- me monté en mi tabla y me senté sobre ella- luego te recuestas y comienzas a remar a hacia la ola- hice una mímica de lo que tenia que hacer. –¿me sigues?- pregunté sonriente. -

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La nueva Heroína de mis Comics *Willow Kennedy*

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