Will, ¿estas mejor? (Willow)

No dije nada más… únicamente nos quedamos mirando un momento con las mejillas sonrojadas, comprendí a lo que se refería (2 días después xD) se levantó y me dio la mano para levantarme del sofá… ¿Algo para mi? Pensé mientras lo miraba con extrema curiosidad… ¿Qué podría ser? ¿La receta de pay de manzana? Aun le miraba con curiosidad cuando apareció con esa curiosa caja en las manos… ¿Qué había ahí? Tendió su manos hacia mí con la caja agarrada, me apené, lo miré un poco confundida:
-No es necesario… ¿Un regalo? –sonreí a medias aun sonrojada y tomé la caja para sacar el moño verde que tenía encima y poder mirar el contenido, ¿No se parece a Billy? Pensé en un bicho disecado en su interior y recorrió una corriente fría por todo el cuerpo. Al ver lo que tenía dentro de la caja, no lo podía creer, lo miré y luego miré de nuevo la caja.
-Es precioso, pero no debiste gastar tanto –le dije aun mirándole y luego mirando el contenido de la caja, era muy bonito, me había gustado mucho-.

La miré embobado mientras ella abría el paquete, sonrío y yo no pude evitar hacer los mismo. El lazo verde cayó al suelo y Will sontenía la caja roja entre sus dos manos. Acaricié la cabeza de Blacky, que estaba algo inquieto y se silenció por mi caricia. Agarré la mano de Will suavemente, y era incapaz de quitar la sonrisa de tonto de mi cara.

-Me gusta hacer regalos-Le dije con una sonrisa, mirandola fijamente-¿Te gusta?-Le pregunté, arqueando un poco las cejas-Dejamé-Volví a sonreirle.

Agarré el collar de la caja. Me levanté y me puse a su espalda, aparté su pelo con una mano lentamente, y con cuidado le puse el colgante en su cuello. Le di un beso en la nuca y la abracé desde su espalda.

Toqué el pendiente con las yemas de los dedos.
-Si me gusta mucho, gracias. –sonreí mirándolo con unos ojos resplandecientes-
El se acercó para ponerme el colgante, vi como pendía de mi cuello y lo toqué con una mano. Sentí sus labios sobre mi nuca lo cual hicieron que mi piel se estremeciera. Sus brazos rodearon mi cuerpo y me quedé en silencio por un instante, no sabía que decir.

Me levanté y le tendí la mano, la ayudé a incoporarse. Le pasé el brazo por la cintura, y caminé con ella hasta la salida de mi habitación. Le di un beso en el pelo y la atraje hacía mí.

-Vamonos de esta casa de locos-Dije riendome y ayudandola a salir de mi armario.

Recorrímos mi habitación, tan ordenada e impersonal que me hizo poner una mueca divertida. Bajamos las escaleras hasta el hall de la planta de abajo, en el salón, mi madre y mi padre leían el periódico en silencio.

-¡Nos vamos ya!-Alcé la voz para llamarles la atención.

Se levantaron y vinieron hacía nosotros. Mi madre se retrasó, recogiendo varias cosas de la habitación.

-Papa esta es Will-Le dije a mi padre, que era bastante parecido a mí, salvo en los ojos.

Mi madre llegó al momento portando varios libros-Mira cariño, te voy regalar estos libros, leelos, aprenderas muchas cosas y trucos nuevos-Will se sonrojó, y yo articulé a mi madre '¿Por qué me haces esto?'. Ella le dejó los libros a Will sobre los brazos.-Y esto es la receta de mi tarta, protégela con tu vida-Bromeó mi madre con una sonora carcajada.

Caminamos juntos hacia la salida del armario, sonreí ante su comentario. De nuevo estaba esa habitación que no reflejaba en lo absoluto la personalidad de Dan. Bajamos hasta el hall donde estaban los padres lo cual hizo que mi corazón casi saliera de mi pecho, su madre me daba cierto temor, sobre todo sus comentarios. Miré al padre que era muy parecido su hijo sobre todo en la sonrisa, le sonreí con amabilidad y le tendí la mano:
-Un gusto Sr Faraday, Willow Kennedy –le dije al Sr. A sus espaldas apareció la madre con una pila de libros, solo mirarla me sonrojaba mucho-
Me dio los libros lo cual me hizo ponerme nerviosa, quise que en ese momento me tragara la tierra al ver la portada de los libros de Marie Faraday.
-Gracias, lo haré.... lo prometo...–dije apenas articulando palabras, quería morirme en ese instante, no pude corresponder con la carcajada, estaba demasiado apenada-.

Miré a Daniel con ojos de rescátame por favor.

Will habló desde atras de la montaña. de libros, mi madre la miraba como si estuviese haciendo una obra social, en vez de incordiarle. La miré con reproche, negando con la cabeza. Ayudé a Will a cargar los libros, lo mejor sería llevarselo que soportar la charla de mama en aquel momento.

-Nos vamos ya, queremos estar en Seattle para el medio día-Le sonreí sabía que quería escapar de allí tanto como yo. Me acerqué a papa y le di un beso, y luego hice lo propio con mama, que acabo por abrazarme-Despedidme de Sean-Le dije sonriendo, mientras ella me peinaba con la mano.

Mi madre habló:Dan portate bien, come y abrigate-Me dio otro beso, al fin y al cabo era mi madre, y despues de tres años estudiando fuera seguía entristeciendose cada vez que me marchaba-Encantada de haberte conocido Willow-Se acercó a ella y le dio otro beso en la mejilla.

Mi padre sonreía, a nuestro lado. Agarré a Will por la cintura, con mi mano libre y fuimos hasta la puerta.

Agradecí que Dan haya tomado los libros. Ahora podía ver a ambos señores completamente con el rostro ruborizado. Sentí alivio al escuchar las palabras mágicas de regresar a casa, sonreí a medias.
-Ha sido un honor conocerlo Sr. Faraday… También a usted señora Faraday gracias por su hospitalidad y por la receta… despídame de Sean… -espero pronto podamos ir a ver aves de nuevo, pensé-.
Después de la despedida, la madre se acercó a Daniel para acomodarle el cabello y decirle lo típico que dicen las madres a sus hijos. Y nos fuimos hacia la puerta de la casa.