Solicitud de Empleo -Olaf-

Materialmente estaba volviéndome loco, mi fiel ayudante y amiga Jamie se había ido de regreso a Seattle y el trabajo en la panadería se había vuelto muchísimo; Amari era buena repostera, pero era insuficiente porque no podía tenerla de tiempo completo aquí; eran los primeros cinco minutos que tenía de descanso y fui a refundirme en el banquito detrás del mostrador; aún faltaban cerca de veinte minutos para que salieran los panqueques que tenía en el horno así que me dejé caer para respirar un poco.

Súbitamente escuché la campanilla de la puerta sonar; por reflejo me levanté de un brinco ¡cómo me dolían los pies! 'buenas tardes, bienvenido' saludé con una sonrisa al que parecía ser un probable cliente indeciso.

Y como caído del cielo ayuda... eso era lo que más necesitaba, no importaba que tuviera que enseñarle todo, con tal de que pudiera estar en el mostrador mientras yo me partía el lomo en la mesa de repostería sería excelente 'mucho gusto Dean, yo soy Olaf, Olaf Andersen' di la vuelta al mostrador, ignorando por enésima vez en lo que iba del día el dolor de pies y le tendí la mano 'en realidad Dean, creo que podemos hacer negocios tú y yo... verás, mi ayudante se regresó a vivir a Seattle y yo estoy volviéndome loco aquí solo, hay demasiado trabajo y uno de estos días voy a dejar los pies en la cocina y los brazos en el mostrador' dije sonriéndole, de puro alivio.

Excelente, un chico dispuesto a aprender, no podía pedir más de mi día 'pues básicamente es hacer pan y repostería... ese es el negocio aquí' dije, abriendo los brazos para abarcar hacia los estantes y los refrigeradores 'no importa que no sepas, puedo enseñarte y créeme... cuando termine contigo, serás todo un artista' le sonreí bromista 'de comenzar, pues si tienes tiempo justo ahora, viejo es un día de suerte para ambos' agregué ahora sí con tono de alivio.

'Bien, lo primero será que veas en donde está todo, así no vas a estar perdido' me adelanté invitándolo a observar 'al fondo sobre el muro más largo, va todo el pan de migajón y el danés; en el estante de en medio panqués y pan de fruta' señalé hacia el mueble hondo de la esquina 'ahí va el pan blanco y arriba las baguettes, que siempre deben estar envueltas en papel plástico para conservarlos frescos' dejé que observara y memorizara 'en la isla de en medio, merengues y galletería' tomé aire para continuar y señalé a los refrigeradores 'pasteles, gelatinas y bocaditos crocantes por ahí' le miré aún viendo si no olvidaba nada del exterior.

'Yo llego aquí a las siete de la mañana, para sacar el pan blanco del desayuno, pero a tí te esperaría a partir de las ocho' comencé a caminar a la cocina 'déjame presentarte a nuestras principales colaboradoras... María y Cecilia' comenté con una sonrisa mientras señalaba los dos hornos 'María se encarga del pan blanco y el pan para pasteles, mientras Cecilia hace todo lo demás' giré a mirarlo para ver su expresión... incluso Amarantha había puesto un gesto raro la primera vez que escuchó los nombres que les habíamos dado a los hornos Jamie y yo; pensar en Jamie me dolió un poco, extrañaba a la chica era muy fácil llevarse bien con ella e incluso la casa se había empezado a sentir sola sin ella por ahí 'sobre mi asistente... pues tuvo que volver a Seattle, la extraño pero tampoco podía retenerla aquí por mucho tiempo, Jamie es genial, ojalá un día pueda presentártela' concluí con una sonrisa..

Lo miré tratando de recordar algún lugar en que estuvieran alquilando espacios 'lo más similar que hay por aquí a una renta de lugares, es el motel y dudo mucho que te quieras mudar para allá... no creo que ahí haya un cuarto que sea simplemente cama, televisión, baño y nada más' reí un poco, Amarantha había decorado personalmente aquellas habitaciones sin siquiera pensar en usarlas, o por lo menos eso había dicho 'pero creo que Forks tiene más opciones, la reservación es pequeña y a veces es un triunfo encontrar donde vivir' recordé mi llegada a Washington y los asiagos días que pasé casi rogándoles en la oficina federal que me vendieran esa casa en LaPush.

'Comenzaremos por enseñarte a hacer masa simple, ve a lavarte las manos y los mandiles están junto a la tarja' le vi marcharse hacia la tarja y fui a poner el letrero de "volveré en 10 minutos" no nos llevaría más de ese tiempo poder enseñarle, además, no quería más clientes en ese momento, la compañía de Dean era algo que iba a agradecer durante mucho tiempo, pero eso no significaba que las cosas estuvieran bien '¿listo Dean? tu primera masa dirá el tipo de panadero que serás' reí un poco ante el comentario, pensando en mi madre y me puse con manos a la obra luego de asearme.