El aula está vacía (Anne Heaven)

-noo...de mentiras...-reí-claro que es en serio...igual tampoco es que vayamos a ser un monton de jovencitos viviendo solos, mi papa y mis tios viven con nosotras, pero igual, siempre hemos sido criadas como espiritus libres, asi que no van a decir nada porque te lleve a vivir con nosotros, y por el dinero no te tendrias que preocupar, no te cobrariamos nada y podrias ahorrar para tus estudios....

-¿aceptas?

-Sí, muchas gracias de antemano...me has liberado de una presión inmensa- Y pensar que venir a esta escuela para dar una vuelta como tal vago que era, me había conseguido un lugar para vivir, junto con una amiga de lo más genial.

-Ah...para que veas que a veces el destino trabaja de maneras misteriosas y te mando un angelito como yo para ayudarte-bromee.

-Soy Anne Heaven, por cierto-reí por el hecho de que no nos habiamos presentado bien aún

Reí con ganas, ya más animado que cuando llegué.

-Soy Elliot Arklay...y hablando de tu apellido, creo que si eres un ángel- Extraordinaria coincidencia.

-Y dale...-reí con él- sabía que me ibas a decir eso...aunque gracias por decirme que soy un ángel...esa si no me la habian dicho en mucho tiempo-le sonreí

-¿Cuando quieres ir por tus cosas a donde te estas quedando?

-Si gustas, me puedo quedar un día más mañana, para tomar las cosas con tranquilidad, mientras les avisas que van a tener un nuevo compañero...no sea que me tomen por ladrón y termine otra vez en el tutelar- Reí, ahora no me molestaba hablar de eso.

Me reí de mi misma

-cierto....no habia pensado en eso...probablemente Claire te daria una patada y rose te pegaría con su violin....-en verdad era una posibilidad, me la imagine y era muy graciosa.

-Ok, yo les aviso hoy y que te parece si mañana me recoges al salir de clase y vamos por tus cosas?

Me dio un terrible escalofrío imaginarme el ser atacado con un violín.

-Claro, no hay problema- Sonreí. -No sabes cuánto te agradezco que hagas esto-

-No te preocupes, pero Eso si, hay reglas....-lo señalé con el dedo indice- nada de comportamientos inapropiados con mis primas...y...no ya esas son todas las reglas jaja...eso es lo unico que si provocaria que mi papa te hechara de la casa...-volví a reir imaginando la escena.

-Primero hay que esperar a que siquiera me toleren, y respecto a tus primos, que se consideren a salvo, no soy como "los otros"- Reí. Hasta donde yo entendía la cabeza femenina, generalizaban un poco, o tenían ademán de clasificar a los muchachos...yo al menos sería tranquilo, después de todo, me prestaban su confianza, pero tenía que ganarmela.

-No te preocupes, somos super relajadas....eso d ela tolerancia s enos da muy bien...si nos toleramos las unas alas otras imaginate-reí- además quein no te va a querer si vienes con un bonus...un perrito!!!-reí -creeme las mascotas le abren el corazon a las mujeres.

-Ok, y no te preocupes por el perro, trataré de que no haga desastre, aunque siempre en las casas anda de convenenciero dejandose hacer mimos y tirado, pero cuando se le da la libertad, la aprovecha- Ese perro era mañoso cuando quería; todo el día.

-Nah...es una casa de espiritus libres, como ya te dije, con tal de que no se meta ni con mi guitarrra, ni con el violin de Rose ni con la ropa de Claire creo que estaremos bien, es mas me parece que lo van a querer mas que a ti-reí-aunque bueno, yo ya te quiero asi que te tienes es que ganar su cariño....

-Lo más seguro es que si se queda adentro, se pondrá a dormir o dejarse consentir, pero si está afuera, se pondrá a jugar con su pelota- Reí, imaginandome a Fenrir haciendo eso.

-Se nota que adoras a ese pedazo de perro...a mi los peces de colores no me duraban mas de dos semanas, por eso dejé de tener mascotas...

-Bueno, los peces no duran tanto tiempo como uno espera, así que yo al menos lo considero dentro de "lo normal"- Intenté animarle, era mi deber, ella lo había hecho conmigo...ni idea de como compensarle ese grandísimo favor que hacía.

-Si bueno...20 peces de colores en menos de dos meses no me parece muy normal-lo contradije y me reí-algunas personas que apenas y podemos cuidar de nosotras mismas no estamos destinadas a cuidar d eun animalito, creeme

-Supongo que será cierto- Reí, vi mi hora...mis padres me enviaban algo por correo, así que debía llegar antes de que cerraran. -Anne, me tengo que ir, me enviaron algo y tengo que recogerlo...mañana vengo por tí, con todo listo, para que no te quedes con ese pendiente- Sonreí.

-Ok, yo igual como que me tengo que ir a hacer la tarea que no hice-reí- ¿estas seguro de que puedes con todas tus cosas hasta acá?...bueno, de todas formas yo voy a ver si me consigo un carro o algo para que vayamos a mi casa.

-No te preocupes, puedo pedir prestado un auto, tengo algunos contactos por ahí- Sonreí maliciosamente y me levanté. -¡Muchas gracias de nuevo! y suerte con tu tarea- Me despedí y salí corriendo a Forks, ¿Dios escucharía mis plegarias acaso?

Reí con su expresión maliciosa y me despedí con la mano.
Tener un chico que equilibrara las cosas en la casa iba a ser interesante.