Esta vez no me lo pensé y contesté de inmediato.
-Sí, si conoces a la persona es diferente. Por eso yo nunca pienso cuando sacio mi sed, y actúo como un depredador cuando cazo...-me ahorré las explicaciones, Estefan ya sabría cómo te sentías cuando era tu instinto el que actuaba por ti, tu instinto el que esperaba el momento, lugar y persona oportunos, tu instinto el que te ayudaba a no pensar en lo que hacías, tu instinto que te dejaba después a solas con los remordimientos...