Habitación de Freda

habitación

refrigerador personal con candado

ahi esta el regriferador >.< el otro no salio.



mi mac

Cuando llegamos a mi cuarto con jane le señale mi cama para que se sentara, aun que sabia que no estaba cansada, era una costumbre hacerlo.
Mire afuera el pasillo para ver si se veía alguien antes de cerrar la puerta de mi cuarto por suerte no se veía nadie.
-todo en orden- dije sonriente a jane.
Me acerque al refrigerador donde tenia las botellas con sangre, lo abrí con la llave que tenia en la pulsera, saque una botella y saque dos copas. Le serví un vaso a jane y otro a mi. Le pase su copa y tome la mía.
-salud- le dije mientras acercaba mi copa a la de ella.

Me tomó de la mano y nos dirijimos a su habitacion, se me hacia agua la boca solo de pensar en la sangre!!.
mientra nos dirijiamos a la habitación, note que Freda iba volteando hacia todos lados como si estuviera vigilando de que nadie se encontrara viendonos, no habia de que preocuparse, el pasillo estaba desierto. cuando llegamos ella hechó un vistazo mas antes de cerrar la puerta. Se volvió y fue al refrigerador que estaba encima de una mesa alta y sacó una botella con la sangre, enseguida de que abrió el refri, el aroma de la sangre me hiso acercarme, Freda sacó unas copas, las sirvió y me dio una a mi...
Freda:
---Salud--
--Salud-- dije disimulando mi desesperación, tenia que recordar que siempre debia de ser educada, no podia olvidar mis principios. Le di un sorbo para probarla, a menudo la sangre no sabia como olía su aroma.

Sonreí impaciente, el olor a sangre me ponía ansiosa, tome un gran sorbo de mi copa, la sangre sabia deliciosamente, mire mi copa y la había vaciado, me reí.

-más?- pregunte a jane deseosa.

--Solo una más por favor!!-- Le sonreí, ya que estaba muy ansiosa y tenia que contenerme por que no quería acabar con su sangre, mientras tomabamos la sangre, empecé a preguntarle...
--¿Me imagino que eres de Italia, no?, lo digo por tu nombre -->Freda<--, sabes yo tambien soy de Italia. Pero bueno cuentame de ti, luego platicaremos de mi.

Le serví otra copa y serví una para mi, esta vez me tome la sangre lentamente.

-nací en Italia, mi padre era italiano, pero a los pocos día de nacida nos vinimos a vivir a estados unidos, new york para ser más especificas, luego por unos problemas de salud cuando era humana, nos vinimos a vivir a forks, mi padre a los pocos días muere, por lo que me tengo que quedar con unos tutores por que aun era menor de edad y eso... a detalle importante, mis tutores son vampiros, ellos me convirtieron- dije terminando de contar mi resumida historia.

-Ahora es tu turno jane, cuéntame de ti- agregue interesada.

--Interesante!!, esta bien ya que lo pides... Bueno nací el 14 de junio de 1915, en una familia normal, tengo un hermano gemelo el se llama Alec, cuando crecimos nos dimos cuenta de que eramos diferentes a los demás niños, por que cuando nos enojabamos, nuestros pensamientos tenian efecto en la persona, haciendole daño, pasó el tiempo y toda la gente nos tenia miedo, e incluso nos corrieron de la escuela y nos confinaron en nuestra casa, rompimos las reglas al salir de la casa, entonces hicieron una audiencia, toda la gente nos condenó a la hoguera, pero cuando menos lo pensaba fuimos rescatados por el maestro Aro Volturi- Al mencionar el nombre de mi maestro hice una reverencia.-Él acabó con toda la gente presente en la audiencia, y nos sacó de la hoguera, estaba interesado desde mucho tiempo antes con nuestros poderes, Aro es como la realeza de todos los vampiro junto con sus hermanos Cayo y Marco; en fin paso el tiempo pero no el que Aro hubiese querido, asi que nos convirtió a la edad de 13 años, somos como su tesoro mas importante, y por consiguiente muchos vampiros nos temen y guardan su distancia al estar en Volterra, Italia. Disculpame si te he asustado u ofendido, te juro que no es mi intencion; en fin esta es mi resumida historia, algo conflictiva.-- Me quedé en silencio y esperé a ver la reacción de Freda.

Quede fría con su historia, no conocía a ni un vampiro con poderes, laurent me había hablado de los volturis pero no de sus nombres, estaba demasiado confundida, y abrumada con tanta información.

-nunca usaras tu poder contra mi, verdad querida?- bromee para romper la tensión.

-no te preocupes todos tienen sus historias, ya sean buenas o malas siempre se pueden aceptar- agregue con una amplia sonrisa.

--Claro que no, nunca los usaría, ahora eres mi amiga y tenlo por seguro que si algún día te encuentras en problemas yo te ayudaré, tienes mi palabra--
Vi que se relajó un poco, talvez le dí mucha información.--Solo te pido un gran favor, esto que hemos platicado, no puedes decircelo a NADIE-- Remarqué mi voz al decir nadie --Debes saber que es informacion muy importante, y si no te tuviera la suficiente confianza no te lo hubiera contado--

Me alegre, al saber que tenia a alguien que me protegería, no era muy buena peleando aun.

-no te preocupes querida, no se lo contare a nadie- me acerque y le acaricie el pelo tranquilizándola. Mire su vaso y ya estaba vació, me levante a buscar la botella y le llene el vaso al igual que el mío.

-cuando fui humana no tuve muchas amigas nadie se quería acercar a mi, porque tenia esquizofrenia, pero ahora ya no, y me alegra que te pueda contar a ti como una amiga- sonreí alegre.

--Gracias-- Dije muy contenta. --A mi también me alegra saber que me consideres tu amiga, y bueno después de esto que haremos?, espero que se te ocurra algo bueno.-- Reí sin parar, yo sabía que se le iba a ocurrir algo, ademas teníamos muchas ventajas, ya era tarde, y el sol se estaba poniendo. --Sabes, el sol se ha puesto que quieres hacer?-- Pregunté ansiosa.

-¿Que te parece si vamos a comprar las togas para la fiesta al centro comercial antes que cierren?- pregunte ansiosa.

-después podríamos ir a dar una vuelta por la plaza de los pioneros y hay vemos que se nos ocurre- me reí. Primera vez que deseaba tanto hacer travesuras, y aprovechar mis ventajas como vampira.

--Claro!! buena idea Freda, no puedo esperar por comprar las togas, deben ser las mejores, además recuerda que eso solo será para la bienvenida, después podremos cambiarnos, y asi podremos comprar muchos nuevos conjuntos, debemos aprovechar esta fiesta para que nos conoscan, y si me gustaria mucho ir a conocer la plaza de los pioneros, sabes desde que llegué siempre he querido ir, solo que he tenido muchas cosas que hacer.

Me alegre mucho ya estaba aburrida de tanto encerramiento.

-entonces querida, manos a la obra- dije alegre.
Tome la mano de jane y salimos de la habitación, antes deje guardada la botella de sangre y las copas, a la vista de cualquier persona al vernos tomadas de la mano pensaría que éramos hermanas.

-nos divertiremos mucho te lo aseguro- le guiñe un ojo, y continué caminando con ella fuera de la fraternidad.
(ahora al centro comercial?, tu creas el tema, tu turno )