Condamnat in Umbra (Irina Vervelle)

Invitado

El paso del condenado, el fluir de la vida del protegido, el encuentro de los combatientes, frente a la ignorancia de la vida mortal a su rededor….

La bahía y restauran de las sanguijuelas …Port Angeles ,el lugar donde el mundo mortal, moribundo ante el creciente fluir de quienes habrían de constituir su propia perdida, quienes habrían de ser merecedores del resguardo de los guardianes , relegados a las sombras de su propia y salvaje naturaleza , para mantener aquellas insignificantes vidas andando , destruyendo a su paso lo que les fue concedido en pro de una coexistencia con quien habría de proporcionarles los medios necesarios para “evolucionar” en los seres egoístas autoproclamados pensantes, descubiertos ignorantes en su superioridad. Se habría de unir a los restos de aquella tierra, una vez salvaje, perfecta en su creación original, ahora decadente…

El espíritu del vigía regocijante en el temor que su sola presencia infringía en sus protegidos , observante y silencioso en el seguimiento del ser que habría negado el descanso en el cumplimiento de sus propias y egoístas ambiciones, cegado ante la oportunidad de una existencia sostenida, subsistente del fluir de quienes habrían de ser considerados frente a sus ojos menos que ganado, nacidos para su propio provecho en el mantenimiento de su aberrante belleza, de la leyenda perdida, vagabunda , exiliada …

El olfato de la bestia siguió fielmente el efluvio de aquella criatura, los efluvios de quienes hubiesen sido sus victimas circundaban, llamando a la bestia a reunirse junto a su errada existencia, el cuerpo andante de la criatura, trazando el camino hacia el perpetrador de las muertes de los estúpidos, atraídos hasta su perdición por la belleza de un cuerpo muerto, pútrido…

Mis pasos siguieron su camino en un lento andar, deleitando los sentidos de el ser deseoso de la sangre en sus manos, - diversión- pensé, mientras el ardor que de su nefasto aroma mis fosas nasales disfrutaban, la oscuridad constituía al mismo tiempo el manto que protegía sus vanas existencias frente a los ojos mortales, admirándoles como a dioses, al igual que la guardiana de los protectores, el llamado del espíritu de las bestias…

La figura de aquella criatura se mostró orgullosa de su porte frente a los espectadores incautos mientras los ojos de la bestia le observaron estudiándole, manteniendo un paso firme, estando al tanto al igual que yo, aquella criatura percibiría con desagrado mi sola presencia, sonreí ignorando a los ojos de los mortales que enfocaban esta vez no con admiración sus insignificantes miradas, si no con el temor ¿por la criatura?

Reí a carcajadas situándome frente de aquella mujer….

-¿La condena de la eterna muerte ha llamado a la aberrante criatura a abandonar su lugar de resguardo y mostrarse frente los ojos de sus asesinos en el placer de la admiración de los ojos de sus presas?- pregunte expectativo mientras los ojos debajo de los anteojos se mostraron para ahuyentar, a los espectadores y regresar la mirada hacia la criatura…

Tema: Re: Condamnat in Umbra (Irina Vervelle) Lun Jul 27, 2009 2:12 am

El camino fue trazado por cuerpos avasallados por supuestas tristezas que no eran más que un montón de estupideces sin sentido, la inutilidad no tenía por que justificarse, sólo eran presas fáciles dispuestas a ser devoradas. Las sombras resguardadas en la oscuridad estaban preparadas para despertar y aparecer a la luz de la luna. La sangre de los desafortunados sería la que correría por sus venas esa tibia noche de Julio.

Su vestimenta elegante como siempre acentuaba su porte y superioridad. Su cabello se estremecía con la suave brisa, brillante, perfecto... siempre perfecto. Los sonidos eran acompañados por delicadas pisadas dignas de la realeza, las princesas no se equivocan en su andar. A esas horas no se hallaban cuerpos sin almas dispuestos a jugar, ni los demonios más feroces eran capaces propietarios de sus destinos en sus frías y suaves manos.

A veces la soledad era la mejor compañera para cazar. Siendo de esta manera que su boca sedienta de elixir llenaría hasta el último espacio de su cuerpo con ese liquido colorido y delicioso. Avanzó sin tambalear por aquella ciudad. Las miradas estaban puestas en su cuerpo, los ojos de aquellos que de a poco serían aniquilados seguían sus pasos. No fue necesario llamar cuando ya una calida presencia se estaba dispuesta a dar. Arrogante miró aquel joven, su piel tostada y sus ojos verdosos no hacían más que acercarse al asecho, rió melodiosamente al darse cuenta de lo que pretendía ese ente con apariencia agresiva. Las porquerías no se comen. Lo llamó con un dedo y este accedió, dando pasos poco certeros hasta sus brazos llegó. No había nadie más que ellos allí, tomó el rostro del joven entre sus manos y de un ágil giro de la columna vertebral lo desprendió.

Los minutos avanzaron y ella retomó su paso, dejó el cuerpo sin vida en la calle abandonado. La multitud la llamaba, los corazones bombeantes requiriendo ser arrebatados de sus cuerpos mortales. Llego hasta donde el mejor aroma salía, un grupo de jóvenes allí se reunían, dulce y con matices ácidos, imaginó el líquido descendiendo por su garganta, llenándosele la boca de ponzoña. Sus ojos brillaban cual dos rubíes al la luz solar. Una sonrisa siniestra se talló en un su rostro cuando de otra presencia se percató. El viento traía hasta sus sentidos un nuevo sabor y un apestoso olor. –Perfecto- susurró junto con la brisa.

Giró lentamente sobre sus talones y al ser aberrante miró. Alzó ambas cejas y de este escuchó. La hostilidad reflejada en su elegante rostro era evidente, levantó el mentón mostrando petulancia. El cambia formas mostró sus ojos y a los humanos espantó.

-¿Desde cuando las mascotas les hablan así a los gobernadores?- le respondió a su cuestionamiento con otra interrogante. Su voz fría y su cuerpo estático permaneció – La muerte lleva a ellos sólo a seres débiles, es por eso que el hilo de mi vida nunca será cortado- aclaró con su cantarina voz.-Nyx manda a los reyes terrenales a ser inmortales- Miró al ser de pies a cabeza, no era más que un juego en el cual estaría dispuesta a ganar.

-¿No es acaso un plebeyo que intenta ser un arrogante?- Negó con la cabeza. Los mortales abandonaban poco a poco el sector. No acostumbraba a ver a seres de diferente especie desafiándola sin previo aviso. Sólo sonrió era muy temprano para usar su don. –Creo que es usted quien vio que su ultimo día era hoy- las princesas son educadas, las princesas son hipócritas y desalmadas.

Invitado

Mantuve una expresión inmutable frente a las palabras de aquella criatura, el “canto del ser frente a su cazador”, la negación del condenado ante la superioridad pérdida frente los seres considerados menos que inmundicia a sus ojos, insignificantes en su propósito, la muerte del pensado inmortal………

Cruce los brazos sobre el pecho, aun observándole para el deleite que de sus palabras carentes de un significado frente mis ojos se mostraron aprensivas.

-Inmortalidad, vida, -reí repitiendo palabras con un significado contextual, la inmortalidad simple concepto creado para el resguardo de las memorias de mortales sobresalientes, mientras la vida habría de ser un privilegio para quien de igual forma habría de gozar de una muerte, -bufe, al pensar en aquellas palabras, mientras el carmesí de aquellos ojos, observaban con superioridad el azul de la bestia..

-El ser eterno no ha de existir, así como el termino vida nunca se ha de ajustar a una aberración como usted –bufe manteniendo aquella expresión de diversión frente sus palabras, fallidos intentos de mostrarse fuerte, superior, invencible…

-La vida que alguna vez albergo ese cuerpo pútrido, abandonó el mismo en el momento en que aceptó convertirse en la criatura.. despojo que eres ahora –sonreí disfrutando, observando el gesto de claro desprecio hacia el que debía de albergar a la bestia designada para su destrucción.

-Los “reyes”- utilicé sus palabras en un claro gesto de desaprobación, vigilante de los mortales en el lugar imposibilitando la bestia surgiera para reclamar la recompensa prometida en la encomienda a su misión.- han de caer bajo la fortaleza de los plebeyos a quienes intentan dominar en su egolatría , cegados frente a una monarquía absurda, condenada a nada menos que la extinción junto a su especie, polvo al polvo ….-nuevamente se dibujo una sonrisa siniestra al pronunciar aquellas palabras , perfectamente reconocibles, comprensibles a la existencia de aquella criatura.

Me encogí de hombros …

-El destino es cambiante, tal y como lo es el de estos mortales-camine a paso lento rodeándole, dispuesto a utilizar las habilidades prohibidas para los ojos mortales, en cuanto intentara emprender la huida –Su corta vida puede ser acortada por el simple capricho de alguien -continué-…algo que cree poseer el poder para decidir sobre las existencias de quienes siguen a diferencia de el “el curso normal de la naturaleza” ,……… ¿Qué los separa de una vida prospera o una muerte prematura? –Sonreí - ¿La presencia del guardián…plebeyo que resguarda sus inútiles existencias por designo de su destino? ¿La destrucción del ser petulante incapaz de reconocer su imperfección frente al espectro de los restos de su cuerpo mortal?

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