Caminaba a paso tranquilo por la universidad, cuando un papel de color rojo y negro llamó mi atención. En él decía que en el campo de la Uni se llevarían a cabo las pruebas para los equipos deportivos de la universidad.
"¿Por qué no?" me pregunté mientras me dirigía hacia el lugar indicado. Total, el almuerzo podría esperar un poco. Al llegar al campo vi que ya estaba un chico y una chica de aspecto algo estrafalario. Me encogí de hombros: Si ella pensaba jugar lacrosse, debía aguantar golpes... Golpes duros. Sonreí ante la idea, eso podría ser un buen desahogo a mis recientes problemas con Angela.
-Hola -saludé con una mano en alto- Vengo para lo del equipo de Lacrosse... Es aqui, ¿cierto?