Caminando un poco...

Estaba por First Street, buscando unas cuantas cosas que me habia pedido mi tia. No podia decirle que no, y mas a sabiendas de que iba a estar alla.
Habia demasiada gente para mi gusto, esto, teniendo en cuenta de que a mi me gusta estar rodeada de toda la gente posible. Compre las cosas, estaba buscando una libreria decente, pero era imposible, en mis dos años alli no habia podido encontrar una. Buscaba las llaves de mi auto, para irme de alli lo mas pronto posible, no las encontraba, y cuando menos pense, estaban alli tiradas en el piso

Maldita sea! - Me dije tomandome la cabeza.

Tenía el día libre, y como de costumbre, me pasé por Port Angeles. Quería comprar un libro que llevaban recomendandome desde hacía semanas; bufé, horrible semana, me quedaba hasta tarde en el trabajo y ahora, que por fin había acabado, la gente parecía aprovechar algo en el lugar, pues había más que de costumbre y esto se volvía desesperante.

Estacioné mi moto a las afueras de unos cuántos edificios, puse lo necesario para evitar robos y vi que una chica buscaba sus llaves, estas se encontraban en el suelo y ella maldecía por lo bajo. Me acerqué y se las entregué.

-Aquí tiene-

Gracias - Respondi al chico que me ayudo - Soy Vanessa - Dije presentandome con el, no pude evitar verle y darme cuenta de que tenia ojos lindos

-Mucho gusto, soy Hansi- Estreché mi mano con la suya. -Y no te preocupes por eso- Añadí con una sonrisa.

Volteé, había demasiada gente por aquí. -¿Están vendiendo celulares o que? Nunca me había tocado un día como este-

Mas que vendiendo, diria que regalandolos - Respondi riendo un poco - Y que haces aca? - Pregunte - Trabajas o que?

-De hecho, vuelvo de mi trabajo, pero vine a comprar un libro que llevan recomendandomelo desde hacía rato, pero creo que elegí el día equivocado- Reí.

Rei - Y que libro es? - Le pregunte. Aunque en realidad no sabia para que lo hacia, no me gustaba leer, lo mas largo que habia leido era un folleto, y ya ni me acordaba de que era.

-Me dijeron que se llama "La Sombra", obra de John Katzenbach si no me equivoco- Miré, el sol estaba en lo alto, y con tanta gente dando vueltas, el calor se intensificaba demasiado.

-Y tu vas de salida, ¿no?-Sonreí, tenía una buena razón para hacerlo.

Sonrei cuando el lo hizo - Si - Respondi - Iba camino a casa - Dije - A proposito...donde vives?

-Vale...es una pena que no se pueda hacer todo por culpa del tráfico humano- Reí.

-Vivo en Forks- Respondí a su última pregunta.

Haa..que bien - Dije sonriendo. Aunque en realidad no me gustaba que viviera alla, por los vampiros y esas cosas. - Yo vivo en La push - Le dije - Has ido? - Pregunte

-Si, una que otra vez, me gustaría volver un día de estos, los pocos atardeceres que había por allá eran muy bonitos...-Recordé que solo había ido como dos veces, una a un café de por ahí y otra en los acantilados.

Bueno pues espero que vuelvas pronto, esta mas lindo que nunca - Dije - Ademas podrias ir a visitarme o algo - Sonrei

-Tal vez, aunque eso se puede malinterpretar- Reí.

-¿Te gustaría acompañarme a comprar el libro? ¿O ya es necesario de que te vallas?-

En realidad no me apetece llegar tan pronto en casa, no quiero ver al idiota que tengo por primo - Dije con mala cara - Pero..porque se puede malinterpretar el hecho de que tu me visites? - Pregunte - No me digas....tienes novia verdad - Hice una pequeña mueca

-En realidad...es más que eso; ya tengo familia- Sonreí, esperando no haberla incomodado.

Porque no me sorprendia, siempre fijaba mi vista en personas con parejas, y ahora habia descubierto que tambien tenia ojos para fijarme en personas con familia, que mal estaba.

Espera...cuantos años tienes? - Pregunte

-Tengo 21, no paso del mes de mi cumpleaños- Dije mientras guardaba las llaves de la moto en la chamarra. Sonreí, ya me esperaba de cierta manera esa pregunta.

-¿Me veo demasiado joven o algo así?- Pregunté aún con la sonrisa en la cara.

Pues no mucho, si te ves como de esa edad - Dije - Solo que te ves demasiado joven como para tener una familia - Intente explicar

-Entiendo...suele ocurrirme, aunque no me arrepiento para nada de haberlo hecho- Seguro me brillaba el rostro, porque me sentía bastante alegre de pronunciar eso.

Era una verdadera lastima que tuviera familia, debia admitirlo, el era muy lindo, pero no podia hacer nada contra eso. - Pues...me alegro por ti - Dije con una sonrisa - Y tienes hijos? - Pregunte.

-Gracias- Sonreí, aunque pude notar un poco de...¿decepción? en su voz.

-Pues sí, de hecho, un par de mellizos-

Mellizos? - Dije sorprendida. Ahora si que no tenia nada que hacer, era lamentable...posiblemente hubiera sido divertido, pero no era una fulana, por ahora - Waoo...eso es...genial? - Dije duando un poco. No era que no fuera algo genial....solo era que no sabia como hacia para cuidar a dos bebes...lloran mucho para mi gusto.

Noté con un poco de facilidad la duda entre sus palabras.

-Es un poco difícil al principio, pero llegas a acostumbrarte, después de todo, son personas, aprendes de ellos de particulares formas- Sonreí.