Pero si lo hiciste estupendamente, Nessie, abracé a mi hija y seguí riendo junto con ella creo que tenemos que hacer esto más seguido, estoy pasándolo genial, miré la pelota a un lado de nosotras y negué con la cabeza mordiéndome el labio inferior, seguro a Jasper no le importaría que hubiéramos tomado su pelota roja.