La sangre llama (Ficción. No valido. Brody-Freda)

Después de que asaltamos el hospital y el banco de sangre. Conduje como alma que se la lleva el diablo hasta nuestro local, ya no me sentía en la película de Tarantino, me sentía en rápido y furioso. La sangre seca la teníamos adherida al a piel, nos bajamos del coche y desnudos aun cubriéndonos con lo poco que trajimos nos metimos al pzyco.

Afortunadamente no había mucha gente. Bueno en realidad no me importaba, soy perfecto, lo sé. Brody y yo andábamos con nuestras bolsas de sangre y con los popotes. Si mi preciosa esposa era especialista en popotes y había llevado unos hasta de figuritas de batman.

Cuando entramos todo el mundo se puso a gritar y pues a nosotros no nos importo, vi que Brody solo por diversión lanzaba ajugas como si fueran dardos.

No podia dejar las malditas bolsitas con sangre, me reia como desquiciada mientras arrojaba mis dardos improvisados con jeringas.
Escuchaba los gritos de la gente.
-Malditos humanos-pensé, dejé mi bolsita de sangre delicadamente en una de las mesas, y me acerqué a un grupo de personas que se encontraban sentados gritando como niñas.
Me trepé a la mesa, y en menos de un segundo ya les habia roto el cuello a todos ellos. En automático los gritos cesaron, me reí.

Caminé de nuevo hasta mi bolsita con sangre.

Laurent se paseaba desnudo, no pude evitar tener pensamientos obsenos. Mi body painting comenzaba a deslavarse, tenia que hacer algo antes de que me notaran sin nada encima. Corrí hasta la cocina del Pzyco y me envolví en papel aluminio, era un vampiro timido, no podia negarlo.

Sali caminando al estilo de robocop, escuché una risa, fulminé a aquella persona con la mirada, se calló.

Me senté en la barra.

-Laurent!! lánzame otra bolsita!!!- le grité, pero el esfuerzo del grito hizo que mi improvisada ropa de desgarrara.
Ahora estaba sentada totalmente desnuda en la barra del bar.

-Cielo, alguna vez viste Coyote Ugly?-me puse de pie y sonreí maliciosa....

Llegue a pyzco más enojada que nunca, no podía creer por todas las cosas que había pasado ese maldito día, nunca antes desee tanto la muerte de los humanos como en ese momento.

El guardia era presa fácil, me abalancé sobre el desprendiéndole los brazos del cuerpo, de un manotazo lo deje pegado contra la pared, sonreí... pero aun no había acabado con el, me gustaba ver su mirada aterrada.... grito de desesperación rogando por piedad...

-imbécil- grite con fuerza, me acerque a el lentamente disfrutando cada segundo de su dolor, me agache y enterré mis garras en su pecho, sacándole el corazón.... la sangre goteaba, lamí mi mano y succioné hasta la ultima gota de su sangre, estaba sedienta, y la sangre de humanos me hacia sentir más fuerte de lo que podía imaginar.

Despedacé la puerta del local, el olor al dulce néctar era intenso, al parecer yo no era la única que me estaba divirtiendo ese día.

-puedo unirme a la fiesta?- pregunte entretenida, los humanos me miraban con recelo.

Divertido sonreí con malicia al ver a mi esposa como envoltorio para horno. No pude evitar en pensar en cosas sucias, me saqué los incómodos zapatos que no servían para nada. Ahora si oficialmente estaba desnudo. Apreté una de las bolsas de sangre en dirección de Brody la cual le cayó justo en la cara por el cabello, y la sangre goteaba.
Sentí entre todo ese alboroto un olor familiar, era el de mi pequeña, por primera vez iba a ver a sus padres haciendo nudismo en publico.
-No mon amour, ¿coyote ugly? –no sabia de que rayos me estaba hablando, pero quería imaginarme que era algo obsceno.

Laurent lanzó la bolsa y el contenido se derramó por mi cabello, mojando mi cara y mi cabello...llevé las manos a mi cabeza, estaba empapada.
-¿Que diab...?, ¡wow! sangre... Oh!!! si, Mmmmm, Oh! Oh! yes, yes, Oh! baby! gimme more, Oh! yes, yes, yes...- estaba revolcandome por toda la barra, me estaba saliendo de control, lo que habia comenzado como comercial de shampoo estaba transformandose en una produccion barata de Playboy :albino:

Traté de tranquilizarme y levanté la vista, acomodé mi cabello y lami mis dedos llenos de sangre, despues me rei avergonzada.

Miré al Bartender que por fortuna (o desgracia) no era mi yerno, lo tomé de la camisa.

-Pásame una de esas malditas botellas- me la dió y comenzé a beberla, sólo por curiosidad, derramé algo del liquido en mi cuerpo.
-¿Que diabl...?, ¡wow! alcohol... Oh!!! si, Mmmmm ¡¡Oh!!, yes....

Reí guturalmente, nunca había visto a mis padres de esa forma, ni a mi madre actuando de esa manera... estaba completamente empapada de sangre y alcohol, y mi padre no despegaba las mirada de ella.
Me senté al lado de una mujer que chillaba despavorida, para apreciar el show que hacia brody, me alegre de que André no estuviera presente por primera vez, la mujer seguía gritando ya me tenia harta

-o te callas... o te callo bastarda- la mire furiosa, aun así continuo con su alarido. Le volé los dientes de un puñetazo desgarrándole más de la mitad de la cara, mi ropa quedo salpicada de sangre tome su vaso y vacié el alcohol en el piso, arranque su mano la sangre corría como una llave abierta puse el vaso abajo para llenarlo hasta el tope.

-por ustedes!- les dije a Laurent y a Brody, eleve la copa y bebí en menos de un segundo el vaso entero, al terminar lance el vaso contra una tipa que estaba a punto de salir del lugar, este le atravesó la cabeza debido a la velocidad. Reí.

Me reí ante la aparatosa actuación de mi esposa, era de lo mas divertida, me encaminé hacia ella, pero pise una de las bolsas de sangre y me fui de sentón en el suelo azotando el culo y haciendo un boquete en el piso.
Me levanté sobándome el trasero y fui donde estaba mí amada… le puse cara de perrito abandonado y le dije:
-¿Me das? –se tomó muy enserio porque me empezó a echar la botella encima, mi cabello que daba lastima estaba peor que nunca y el liquido que caía en mi cabello no mas rebotaba como si fuera impermeable-.

Comenzé a tomarme junto con Laurent todas las botellas, el bartender salío despavorido, lancpe un guiño a Freda, me alegré tambien que no fuera André, el pobre ya habia pasado demasiado y el verme desnuda, supuse seria una mala experiencia para él... XD

Creia que el alcohol no haria efecto en nuestros cuerpos, pero despues de un rato, comenzé a decir estúpideces. Me levanté de nuevo en la barra y tropezé, cai encima de Laurent, las risas se hicieron presentes.

Pasé mi brazo por los hombros de Laurent.

-Oye... (hipo).... Te quiero un shin... (hipo) un shin... (hipo)... mushoooo, en serioooo.... (hipo) y no me importa que...(hipo) no me ...(hipo)- no pude seguir hablando y comenzé a sollozar y para acabarla el maldito hipo no me dejaba en paz.

-Laurent, creo que me siento mal- alcanzé a decir. No podia creer que me estuviera convirtiendo en un vampiro exhibicionista y borracho.

No dejaba de sollozar, un retortijón estalló en mi estómago....

-Oopss- me rei y llevé las manos a mi estómago....

Y ahí estaba mi madre completamente desnuda y borracha?... no sabia si echarme a reír o a llorar de vergüenza... preferí reír, le ordene quitarse la ropa a dos personas, me acerque hasta donde estaban mis padres con la ropa entre las manos.

-mamá, ya paso Spencer Tunick por la ciudad, te equivocaste de día- reí, le lancé las prendas femeninas, y una mirada suplicante.

-dad por favor- le lancé las prendas masculinas.

-creo que ya se han deleitado lo suficiente con su desnudo nuestros gentiles invitados- sonreí de medio lado.

Atravesé la barra hasta donde se encontraba el vodka.... si ellos pueden porque yo no? Pensé... me embutí la botella entera en menos de un minuto, pero no sentí efecto alguno, me enoje, tome una botella de Tequila y repetí la escena al menos 5 veces sin tener efecto alguno... hasta que me moví para mirar encarar a mis padres... la cabeza me dio vueltas, y el estomago para que decir... sentí como todo lo bebido venia de vuelta por mi garganta (vomite), mierda!!!!!!!, vomite todo sobre Laurent y brody no alcancé a moverme o hacerme para otro lado. El olor era asqueroso entre sangre en descomposición y alcohol de mala calidad.

-perdon!!!!!!- grité.... tratando de secar sus rostros con un paño torpemente no sabia si estaba secando a Laurent uno o Laurent dos, o talvez era a Brody tres.

Nos empinamos sepa dios cuantas botellas, hasta podía cantar las rancheras en un tono muy arrastrado.
-Y yo sigo siendo el rey
Abracé a mi amor que ya estaba más borracha que el alcohol, esto era divertido como no se nos había ocurrido antes. Le acaricie el rostro mientras la miraba a los ojos cuando dijo que se sentía mal, me preocupe enseguida. No dejaba de hacer hic, hic, hic.
Ayudé a Brody a vestirse, aunque se sentía mal todavía, me dijo que le daba vueltas todo, como si estuviera en la medusa de Six Flags. Me puse un pantalón, solo porque me lo pidieron, pero por mí seguiría de exhibicionista como siempre. Nos empezábamos a poner cachondones cuando nuestra ocurrente hija nos viene a vomitar encima, lo cual hizo que su madre vomitara y yo vomitara y todo se haya vuelto un vomitadero asqueroso.

Esto ya estaba demasiado asqueroso, atroz e irreal.

De nada habia servido tanta sangre con popote en mi cuerpo, lo habiamos echado todo, bonito final.

De pronto ya tenia puestos unos jeans y una especie de blusa horrible, Laurent estaba medio vestido y Freda limpiando un poco de su desastre.

Me quité de la barra, medio mareada y con un aliento de los mil demonios.

Vi llegar a alguien conocido, lo observé detenidamente, tenia hambre de nuevo y esta vez prometí no cruzarme con el alcohol. Lo vi, me vió, nos vimos.... Laurent me siguió, la persona recién llegada nos veia, veia nuestro desastre y vi el terror en sus ojos al ver vacio su lugar de trabajo.

Me reí de nuevo como loca y me avalanzé a él, clavé mis colmillos en su cuello y comenzé a succionar su sangre, vi sus ojos de terror, pero nada importó, Laurent estaba tambien encima de él, drenándolo todito, todito..... Freda nos veia aterrorizada, decepcionada, pero ..... hambrienta. Se nos unió al festin, gritos, gritos, llantos... terror.... era nuestro lugar perfecto.

-Ahmmm rico.....- me limpié la boca- siempre le tuve ganas- dije.
-Era un buen chico pero preparaba pésimos martinis- agregó Laurent
-De todos modos casi lo mato aquella vez que me enseñó los calzones- chilló Freda.

Y ahi quedó el pobre André.

Juntos y tomados de la mano, aun tambaleantes por el exceso de alcohol, nos convertimos en murcielagos y salimos volando de ahi.

FIN