Morrigan Ulrich

Invitado

Nombre completo:

Morrigan Ulrich

Personalidad:

Tiene problemas de temperamento, no es una persona muy pacifica pero hace lo necesario para serlo, se irrita con demasiada facilidad y no es tan tolerante como debería. Tiende a la desobediencia y a la holgazanería, pero en ratos se vuelve insoportablemente activa – Al ver partidos de los Chargers y Patriots-.
Pocas personas son las que considera importantes para si. Los demás pueden hacer y deshacer lo que quieran, pero por sus seres queridos siempre estará al pendiente.

A simple vista se le ve como a una chica arisca y distraída, pero en realidad esta al pendiente de todo lo que sucede a su alrededor sin que los demás lo noten,

Físico:

Morrigan es de apariencia frágil, aunque presume de una muy buena condición física y fuerza. Mide 1.72, su cuerpo es esbelto pero firme, de rasgos afilados y ojos grandes de tono grisáceo –verdosos dependiendo de la luz-. Se debe destacar su rebelde cabellera, siempre ondulada y a media espalda, nunca más larga ni más corta.

Edad:

18 años

Historia:

Nacida en Toronto, de ascendencia francesa y dinamarquesa. Durante casi toda su infancia vivió con sus padres en el barrio de Rosedale, siendo hija única recibía demasiada atención para su gusto; sobreprotección en todo y cada uno de los sentidos, aun a pesar de que siempre fue una niña muy sana y tranquila, nada por lo cual preocuparse.

Al cumplir 11 años, su padre, un arquitecto reconocido dentro de la empresa en la que trabajaba fue ascendido, teniendo que trasladarse con su familia a San Diego. Fue un buen cambio según la madre de Morrigan, que desde hace tiempo insistía en que se mudaran a un lugar un poco mas soleado que su ciudad natal. La mudanza se hizo y Morrigan fue inscrita en una de las tantas primarias de la zona, al ser la nueva de la escuela fue un poco tedioso para ella adaptarse a sus nuevos compañeros y a las bromas que le gastaban por su forma de ser tan retraída a diferencia de los demás. No tenía los mismos gustos que las niñas de su clase, mucho menos le gustaba el comportamiento que veía en ellas, simple y totalmente superficiales y el juntarse con niños no le resultaba del todo agradable aunque los temas de los cuales hablaban le resultaban más interesantes.

Tiene un día bien marcado en su mente, mas bien el único que recuerda con claridad de su estancia en San diego; se podría decir que hizo su primer amigo en la escuela, aunque de una manera un tanto…peculiar.

“Realmente tengo sueño, al menos ya terminaron las clases!!!, pienso para mi misma mientras camino con mi mochila al hombro. En eso, un grupo de animales –compañeros o como sea- pasan corriendo.

-Quítate niño!- grita uno de los gemelos con los que estudio después de empujarme al pasar a lado mío. Suspiro tensando mis manos…niño…como se atreve ese enano a llamarme niño! No hay cosa que odie más que me digan niño.

Camino a paso firme pero lento, no con tanta prisa para evitar otro golpe, hoy amanecí muy tranquila como para que me hagan enojar más.
Llego a su lado, está parado con tranquilidad jugando con una pelota de béisbol en sus manos en la entrada.

-Ike!- sonrío mientras me le acerco, me mira con cierta confusión y antes de que diga
palabra alguna estrello mi puño contra su rostro, no medí muy bien la fuerza del golpe, solo
escuché como su cabeza rebotó contra la pared.- Se te olvidó eso- sonreí aun mas
mientras unos se rían y otros se lo llevaban como podían a la enfermería, el otro gemelo se acerca con gesto sorprendido y curiosamente en vez de gritar el porqué le hice eso a su hermano, me sonríe y me agradece
Lo mire realmente confundida, pero después no pude mas que sonreír ligeramente por eso.”

De ahí fue como hizo amistad con los gemelos Arklay, siendo ellos con los únicos con los cuales hablaba libremente, adoptando a Elliot como casi un hermano para ella. Poco tiempo fue necesario para que los rumores comenzaran en la escuela, diciéndoles que entre Elliot y Morrigan había algo, ambos, ni aceptando ni negando el asunto, solo se sonrojaban ante esto, aunque por obvia, Morrigan reaccionaba con menos tranquilidad que su amigo.

Muchas cosas más sucedieron, hasta que nuevamente volvieron a Toronto cuando ella tenía 14. Su padre había renunciado a su antiguo trabajo, creando su propia mini empresa en aquel lugar, aparte de la nostalgia que sentía por su tierra. Fue doloroso y difícil para Morrigan hacer ese “cambio de vida” ya que a aquellos dos que tanto quería, sabia que tal vez no volvería a verlos.

La empresa progresó, extendiéndose a más lugares en Canadá y Estados unidos. Hace un año que su familia se trasladó a Seattle, donde actualmente radican.

Raza:
No soy animal, gracias e_e

Rango:
Clase media?

Habilidad especial:
dadosz

Ocupación-Empleo:
Nada útil

Otros Datos adicionales:

- Es adicata al café y al algodón de azucar
- Le gusta ver la lucha libre y los partidos de futbol americano, su equipo favorito son los Patriotas de Nueva Inglaterra.
- Los gemelos la obligaron a irle a los Chargers de San Diego, aun guarda una camiseta, regalo de Elliot.
- Practica Box y Lucha libre, por lo cual a veces se divierte aplicando "llaves" a sus mas cercanos.
- Siempre está al pendiente de todo, aunque no se note.